Un incendio en un local en la glorieta Amadora provoca el desalojo de 200 familias

Los afectados, vecinos de la promoción Los Jardines de Trassierra, valoran aún los daños que el humo ha provocado en sus viviendas

Los bomberos intentan sofocar el fuego originado en el local de la calle Músico Cristóbal de Morales.
Los bomberos intentan sofocar el fuego originado en el local de la calle Músico Cristóbal de Morales.
G. N. J.

22 de enero 2015 - 01:00

Un incendio en el almacén de un negocio chino situado en la calle Músico Cristóbal de Morales, junto a la glorieta Amadora, obligó en la noche del pasado martes al desalojo de 200 personas, inquilinos de las viviendas ubicadas en los bloques colindantes al local incendiado y que forman parte de la promoción Los Jardines de Trassierra. El fuego se inició poco después de las 22:15 del martes en los bajos del edificio y los bomberos no lo dieron por extinguido hasta pasada la medianoche. Durante el día de ayer, sin embargo, los efectivos del SEIS continuaban en la zona realizando labores de ventilación.

El fuego, según fuentes del servicio de Emergencias 112, se concentró en una parte del local, lo que provocó que el siniestro fuese bastante aparatoso y se generase una gran cantidad de humo que afectó a las viviendas de los bloques situados en los números 13 y 14 de la calle Músico Cristóbal de Morales. A consecuencia del fuego, tuvieron que ser desalojadas en un primer momento unas 200 personas, de las que aproximadamente la mitad pudieron volver a sus casas a lo largo de la noche. El resto se realojaron con amigos y familiares. Los servicios sanitarios desplazados hasta el lugar de los hechos, además, decidieron que dos de los inquilinos desalojados fuesen trasladados al Hospital Reina Sofía por inhalación de humo.

Los vecinos afectados por el incendio, y que pudieron acceder a sus viviendas, se encuentran aún valorando los daños provocados por la densa humareda y que ha afectado sobre todo a las paredes y al mobiliario de los inmuebles. Además, ayer dos de los portales de los bloques afectados continuaban cerrados por temor a que afectara a la seguridad de los inquilinos.

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