Los guardianes de la vida del vino

El vino es un elemento vivo. Evoluciona, sufre, mejora. Porque forma parte de la cultura más profunda y arraigada de los hombres, tiene amigos y enemigos. Va a más con la temperatura constante, con la oscuridad, con el silencio, con el reposo; y se pierde con los ruidos, las vibraciones, la humedad y los cambios de temperatura. Para colmo, uno de los aliados del vino, el corcho, también es materia viva arrancada del vegetal, por ello es tan importante para la buena conservación de los caldos, sobre todo la de aquéllos a los que tenemos más estima. El empresario Curro Sanz y el ex futbolista Álvaro Novo han puesto en marcha un servicio de guardia y custodia de vinos para conservar los caldos de sus clientes de la mejor manera posible. ¿Qué es esto? Muy sencillo. Las viviendas actuales no tienen condiciones para conservar vinos en la mayoría de los casos y muchas botellas se pican o se echan a perder porque se almacenan de forma equivocada. Lo que ofrecen Sanz y Novo es precisamente la custodia de esas botellas en su bodega situada en el sótano de la taberna Caballerizas Reales, situada frente a este emblemático edificio de la ciudad.

Sanz explica que el cliente tiene dos opciones: "Puede dejar aquí sus botellas a cambio de una cuota mensual que va desde los nueve euros y tomársela en la taberna acompañado de quien quiera y cuándo quiera o puede pedirla en cualquier momento y nosotros la llevamos a su domicilio o a donde desee". Así de sencillo. El envío al domicilio es gratuito y la degustación en el establecimiento se realiza previo pago del "descorche" y el servicio, que cuesta seis euros. Aparte de todo esto, la sociedad Sanz-Novo tiene previsto realizar catas dirigidas con maridaje y asesorar a sus clientes en la conservación y degustación de los caldos de más renombre.

Sanz y Novo ya están recibiendo botellas y están montando una cava que estará a pleno rendimiento el mes que viene para guardar los caldos, cuya explotación se combinará con una tienda gourmet donde se servirán patés, aceites y demás productos de máxima calidad. Más allá, ya estudian la venta on-line, clave para avanzar en el mundo actual.

Y es que Novo, jugador de equipos de primera como el Atlético de Madrid, el Mallorca o la Real Sociedad se introdujo en el mundo del vino de la mano de su compañero en el equipo colchonero García Calvo. "Él era accionista de la sociedad Cepa 21 y me introdujo en el mundo del vino. Además, cuando estuve en San Sebastián hice contactos y amigos relacionados con este mundo", explica el ex futbolista.

En este sentido Sanz, resume que la oferta no se reduce a particulares, sino que se ofrece a grupos, a empresas, a familias y a todo aquel que quiera conservar su vino de la mejor manera posible.