La subdelegada del Gobierno en Córdoba, Rafaela Valenzuela, ha valorado este viernes 15 de octubre los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el año 2022, que según la previsión hecha pública por el Gobierno el pasado miércoles dejarán en la provincia 141,26 millones de euros, es decir un 24% menos que las cuentas aprobadas para el ejercicio en curso y apenas una inversión de 181 euros per cápita, lo que deja a la provincia a la cola. De ellos, algo menos de 24 millones suponen una inversión real, pues el resto recae en empresas públicas que, eso sí, realizarán actuaciones en Córdoba, las más destacadas en el ámbito ferroviario, con el corredor Mediterráneo y Atlántico que parará en El Higuerón y el baipás de Almodóvar del Río, que evitará que las conexiones entre Sevilla, y Granada y Málaga tengan que realizar parada en la capital, lo que en realidad no supone beneficio alguno.

Rafaela Valenzuela, como cabía esperar, ha defendido las cuentas presentadas por el Gobierno de Pedro Sánchez, dejando claro desde el primer momento que analizarlas "sin tener en cuenta a la base logística" del Ejército de Tierra General Javier Varela, que se instalará en el polígono de La Rinconada, es de tener "mirada miope", pues el proyecto tiene "sus propios mecanismos de financiación". De hecho, la subdelegada ha destacado que "con estos Presupuestos y la base, Córdoba es una de las grandes apuestas del Estado después de esta pandemia", porque "es la gran apuesta del Gobierno en Córdoba y la que la va a cambiar radicalmente". Esto hace que se sienta "tranquila" porque estas cuentas "van a servir para dar un gran impulso" a la economía provincial, al tiempo que van a permitir seguir con la adaptación hacia el modelo de sostenibilidad que ya se impone.

En una comparecencia pública en la sede de la Subdelegación en Córdoba, Valenzuela ha hecho referencia también a todas aquellas partidas que afectan a la ciudadanía de forma global, como las relativas a pensiones, prestaciones, subsidios o becas, catalogando de "superficiales" las críticas "bastante injustas" que los PGE han recibido desde su presentación, pues "no ha habido tiempo material para conocer todo el documento". Es más, para aquellos que los han tildado de "atraco", ha recordado los últimos del PP, que dieron a la provincia solo 57,8 millones, por lo que "eran un 41% más bajos".

La subdelegada ha insistido en que "estos Presupuestos sí reflejan fielmente la política del Gobierno" y ha reseñado que "están pensados para cambiar el modelo productivo y hacer un país más sostenible y estar en línea para abordar los retos del cambio climático, frenar la despoblación, la digitalización…". La socialista ha puntualizado que estas cuentas tienen una doble vertiente, para las personas y para las infraestructuras, analizando a continuación ambos apartados de manera somera.

Valenzuela ha destacado las ayudas a los jóvenes a través de las becas, que alcanzan una cifra récord tanto en beneficiarios como en cantidad, y que se abren a los inmersos en oposiciones al cuerpo de Justicia; o los bonos de alquiler o culturales, que en Córdoba podrían superar los 3 millones y las 10.000 personas, respectivamente. Y también ha hecho mención al aumento en un 4,8% de las pensiones -un 3% para las no contributivas-, de las que pueden beneficiarse los más de 173.000 pensionistas cordobeses; la subida del 2% en la retribución de los empleados públicos, que son más de 46.000 en la provincia, y la apuesta por la digitalización y el I+D+i, con implicación directa de la Universidad de Córdoba, que recibirá una partida de 2 millones para recualificación y modernización.

Más allá de referirse también a la subida en las partidas para dependencia, la extensión de los ERTE o los incrementos del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y el Ingreso Mínimo Vital o el bono térmico, que ponen "mucho dinero en circulación para que las personas puedan llevar una vida más digna", Rafaela Valenzuela ha desgranado el gasto previsto en infraestructuras en Córdoba, donde "hay grandes inversiones muy importantes", sobre todo en materia de transporte, aunque además de las grandes obras de ADIF para el corredor Mediterráneo y Atlántico que parará en El Higuerón y el baipás de Almodóvar del Río, poco más.

Algo que se repite en cuanto a las carreteras, con una mirada a futuro para mejorar la movilidad rural de la que no hay planes concretos, y un olvido -otra vez- en proyectos altamente demandados como la A-81, la N-432, las conexiones de la Ronda Oeste de la capital, por mucho que la inversión ascienda a 10,2 millones, de los que 8,7 van destinados a conservación y recuperación de las vías ya existentes. Igualmente atrás se queda el aeropuerto, mientras que aparecen de manera testimonial la nueva comisaría de la Policía Nacional en La Fuensanta -sí está en marcha el plan de la nueva oficina de atención al ciudadano, que irá en la Avenida América, cerca de la estación del AVE-, la rehabilitación de la Capilla Real de la Mezquita-Catedral y la rehabilitación y ampliación del Museo Arqueológico, que cuenta con una planificación plurianual cercana a los 15 millones que habrá que ver en qué queda.

De momento, más reales parecen las inversiones que provienen del 1,5% Cultural para proyectos de puesta en valor del patrimonio histórico. En concreto, en Córdoba aportará más de 4 millones a actuaciones en las localidades de Fernán-Núñez, Hornachuelos, Montilla, Priego de Córdoba y Villafranca, y destinará una transferencia de 2,17 millones al Ayuntamiento de Cabra para la recuperación de la ladera norte del barrio de la Villa. Este mismo municipio, como parte de la zona de regadío Genil-Cabra, también se verá beneficiado de los gastos previstos en el nuevo Plan Hidrológico del Guadalquivir 2022-2027.