La 'estrategia andaluza' por Cajasur está amenazada por grandes grupos

La lista de posibles adjudicatarios de Cajasur cuenta con dos cajas andaluzas, Cajasol y Unicaja, y con importantes grupos financieros como BBVA, Caixa Geral o Banco de Sabadell, pero además hay dos cajas de mucho peso: Ibercaja y la vasca BBK. Y esta concurrida lista, que podría incrementarse con alguna oferta de última hora llegada por correo al FROB, amenaza la estrategia andaluza, liderada por el PSOE y secundada por la Junta, para que Cajasur se quede en la región. Precisamente ayer, la consejera de la Presidencia y portavoz del Gobierno andaluz, Mar Moreno, defendió que Unicaja o Cajasol son "dos destinos excelentes" para Cajasur en la puja abierta tras la intervención de la entidad cordobesa por el órgano supervisor. "El Banco de España toma sus propias decisiones e imagino que habrá querido garantizar alguna concurrencia a la subasta", señaló la titular andaluza de la Presidencia, quien aprovechó para dejar claro que, "en opinión del Gobierno andaluz, Unicaja o Cajasol son dos destinos excelentes para Cajasur".

Esto y las declaraciones del presidente, José Antonio Griñán, del pasado fin de semana, en las que invitaba a ambas entidades a mirarse para buscar objetivos comunes, y las del consejero de Economía, Antonio Ávila, suponen la certificación de que la Junta y el PSOE lucharán con uñas y dientes para que Cajasur no se vaya de Andalucía y, junto con Caja Granada -que parece haber sido reconducida al redil andaluz pese a sus veleidades foráneas-, volver a soñar con una gran caja andaluza que ejerciera de gran palanca financiera para el desarrollo de la comunidad.

El problema es que ahora las amenazas son muy importantes. Fuentes financieras consultadas por El Día apuntan que el "gran tapado del Banco de España" podría ser el BBVA, pues habría una corriente en el supervisor que estaría en contra de que la adjudicación de Cajasur fuera para una caja. Sin embargo, otras fuentes apuntan a que el gran temor de la Junta se encuentra en entidades como la vasca BBK o la portuguesa Caixa Geral, dos grupos muy potentes y saneados y que de momentos no han entrado en los procesos de fusiones, por lo que su capacidad de petición de fondos al FROB están intactas. También existe un cierto alivio en el PSOE por que finalmente no esté Caja Madrid, sobre todo porque siempre se temió que hubiera algún tipo de estrategia oculta entre el Cabildo, el PP y la entidad que preside Rodrigo Rato.

El presidente de Unicaja, Braulio Medel, por su parte, ratificó que su interés también está en que se configure una caja andaluza "a través de una concentración de entidades tan grande como sea posible". Medel, que ironizó con su participación en la puja de Cajasur y ni confirmó ni desmintió nada, señaló que en estos tres últimos años "todo el mundo ha hablado con todo el mundo", en referencia a las fusiones.