Ecologistas en Acción reclama un plan de restauración para la zona afectada por el incendio de la Albaida

El reciente incendio forestal declarado en la zona de Albaida, en la Sierra de Córdoba, ha vuelto a poner de manifiesto la elevada vulnerabilidad de este espacio natural ante los siniestros de este tipo, advierte Ecologistas en Acción. La organización ha instado a la Brigada de Investigación de la Junta de Andalucía, en coordinación con el Seprona de la Guardia Civil, a esclarecer el origen del fuego. Aunque todo apunta a que comenzó en la cuneta de la carretera CO-3402, desde la organización ambiental advierten que esto no implica necesariamente que haya sido provocado por una colilla arrojada de forma negligente.

La importancia de conocer con precisión la causa de cada incendio radica, según el colectivo ecologista, en la necesidad de definir medidas específicas de prevención que permitan reducir el riesgo de nuevos fuegos en la zona afectada.

Ecologistas en Acción ha expresado su agradecimiento a todas las instituciones públicas involucradas en las labores de extinción, destacando especialmente el trabajo del personal del Plan Infoca. “A pesar de sus justas quejas y reivindicaciones, su compromiso con la protección del medio ambiente es absoluto”, afirman. La organización también subraya la necesidad de un mayor reconocimiento social y de mejores condiciones laborales para los bomberos forestales, quienes “se juegan la vida intentando minimizar el daño a nuestro patrimonio natural y, en algunos casos, salvar vidas humanas”.

La Sierra de Córdoba, según denuncian, se encuentra cada vez más expuesta a los incendios forestales por múltiples factores, entre ellos el aumento de las temperaturas debido al cambio climático y la gestión deficiente de los espacios naturales. “La Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Córdoba lo saben o lo deberían saber, pero no se está haciendo lo suficiente para reducir esta vulnerabilidad”, han señalado.

El incendio de Albaida obligó a desalojar preventivamente a cientos de personas, algunas de ellas residentes en áreas urbanizadas de origen irregular o ilegal como Santa Ana de la Albaida y la parcelación Casilla del Aire. Ecologistas en Acción advierte que estas construcciones diseminadas en zonas eminentemente forestales incrementan el riesgo, ya que amplían la conexión entre lo urbano y lo forestal, dificultando el control de los incendios y desviando los recursos de extinción hacia la protección de viviendas e infraestructuras.

“Si los medios aéreos se centran en evitar que las llamas alcancen zonas habitadas, los frentes forestales quedan relegados, aumentando las probabilidades de reactivación del fuego”, explican. La organización responsabiliza a las administraciones públicas de la situación actual, acusando tanto al Ayuntamiento de Córdoba como a la Junta de Andalucía de haber permitido durante décadas cientos de construcciones ilegales en casi una treintena de parcelaciones en la Sierra.

Ante la situación, Ecologistas en Acción ha reclamado a la Junta de Andalucía la puesta en marcha de un Plan de Restauración del área afectada. Este plan, según proponen, debería incluir la prohibición de entrada de ganado en la zona calcinada durante al menos tres años y el respeto al proceso de revegetación natural, que será clave para la recuperación del ecosistema. Además, destacan la existencia de pequeñas áreas no afectadas por el fuego dentro del perímetro, gracias a la labor del Infoca y a la evolución del propio incendio, que serán esenciales para la regeneración natural del entorno.