La dirección local de IU dimite en bloque por desacuerdos con García

Galileo Florido reconoce que las relaciones son "tensas" y que Ganemos ha dejado "desorientada" a la federación de izquierdas

El coordinador local de IU, Galileo Florido, en una imagen de archivo.
El coordinador local de IU, Galileo Florido, en una imagen de archivo.
Anabel Calero

08 de enero 2015 - 01:00

Lío, y gordo, en IU a apenas cuatro meses de las elecciones municipales. El coordinador local de IU, Galileo Florido, tiene previsto anunciar hoy su dimisión al frente de la organización, así como del resto de miembros de la dirección colegiada local -la que se encarga por el día a día del partido- por "discrepancias" con el coordinador provincial y candidato a la Alcaldía, Pedro García. La dimisión de Florido era un secreto a voces y ya en septiembre amagó con hacerlo en una asamblea que acabó con el cese de varios miembros de la dirección provincial.

El coordinador local sí ha dado ahora el paso porque la situación con García no ha mejorado, sino todo lo contrario. Florido calificó ayer como "tensas" las relaciones entre los dos, una manera suave de decirlo ya que hace meses que apenas hablan y tienen una visión distinta de cómo se está afrontando la candidatura a las municipales. Y, en el origen de todo, está la cuota de poder y el giro que desde hace meses parece que ha dado García en favor del PCE, dejando a un lado a la dirección local que, precisamente, fue quien apoyó su candidatura. Hace ya meses que algunas voces de IU estaban alertando del acercamiento del coordinador provincial al sector duro del PCE como José Manuel Mariscal, Alba Doblas o Elena Cortés. La diferencia ha sido más evidente desde el surgimiento de Ganemos y la posibilidad que se abrió durante unos meses de que hubiera una confluencia entre este nuevo partido e IU. La estrategia que se desarrolló para conseguir llegar a una coalición de partidos -y que al final no salió adelante- puso en evidencia que cada uno iba por un lado, ya que no se consiguió movilizar a las bases para obtener la mayoría deseada en la asamblea. Hace tiempo, además, que había voces en contra de la candidatura de García y una división explícita dentro del partido. Desde la dirección local también se afea al candidato que no está siguiendo la hoja de ruta marcada por el partido y que se acordó con su designación.

Con todo, el panorama que se presenta para IU es bastante preocupante si se tiene en cuenta que la formación se queda sin dirección a cuatro meses de las municipales. Aunque Florido explicará hoy de manera pública los motivos de su decisión, ayer reconoció que la formación está "desorientada" desde que Ganemos le dio calabazas y en cierto modo justificó su dimisión para "desbloquear" la situación que se ha generado. Habrá que ver cómo se resuelve la situación pero por el momento queda en entredicho el papel de García como aspirante a la Alcaldía y, entre tanto lío interno y el auge de Ganemos y Podemos, puede que la federación de izquierdas se exponga a obtener el peor resultado electoral de su historia.

Florido desveló ayer algunos de los motivos por los que ha tomado esta decisión y lamentó que ha sentido "impotencia" por conseguir los objetivos marcados cuando asumió la dirección en enero de 2012. Además defendió que la dirección local de la federación de izquierdas se ha posicionado "a la vanguardia como organización por delante de procesos y discursos que calan en la sociedad" pero "nos hemos encontrado un muro constante en la organización", que "no nos permiten cerrar el proceso", apuntó el coordinador local.

Florido reconoció por tanto que la dirección colegiada del partido no está pudiendo cumplir con los objetivos que se propuso y en este punto justificó su misión para "dejar que la dirección fluya". En cuanto a la relación con García reconoció que "deberíamos tener una relación constante y diaria y tener cerrada una estrategia a cinco meses de cara a las elecciones municipales", lo que no se está haciendo.

Este periódico intentó ayer sin éxito hablar con García para que mostrase su opinión sobre el asunto que ha llevado a Florido y la dirección local de IU a dimitir, ya que se ha apuntado a él directamente como el motivo principal. García, de hecho, no ha querido manifestarse en estos último meses sobre el tema y hasta se ha limitado a decir que no conocía las discrepancias de las que se hablaban.

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