Una Diócesis con futuro
Han sido 147 los sacerdotes que se han ordenado en la Catedral en estos últimos 25 años, en los que al frente del Obispado han estado cuatro prelados
Especial 25 años de El Día de Córdoba
La Diócesis de Córdoba es, sin duda, un oasis de las vocaciones sacerdotales en España. En estos 25 años, según los datos aportados por la institución eclesiástica, han sido 147 los sacerdotes ordenados. Una gran cifra ante el desierto de vocaciones que hay en todo el país y que parece no tener fin. Los últimos cuatro diáconos, que es el primer grado del orden sacerdotal, se ordenaron Córdoba en mayo de 2025. A diferencia de otras diócesis en los que los seminarios han desaparecido por falta de vocaciones, los de Córdoba –tanto el menor como el mayor de San Pelagio, junto al Misionero Redemptoris Mater San Juan de Ávila– cuentan con savia nueva cada año.
A lo largo de este cuarto de siglo han sido cuatro los obispos que han estado al frente de la Diócesis cordobesa: Javier Martínez, entre 1996 y 2003 y actual arzobispo emérito de Granada; Juan José Asenjo, entre 2003 y 2008 y arzobispo emérito de Sevilla; Demetrio Fernández, entre 2008 y 2025, actual obispo emérito de Córdoba; y Jesús Fernández, que apenas lleva unos meses en el cargo, ya que tomó posesión del cargo el 24 de mayo de 2025.
Cada uno con su impronta y las propias características sociales y económicas del momento en el conjunto de la provincia de Córdoba, los cuatro obispos han desarrollado o, llevarán a cabo en el caso de Jesús Fernández, su misión evangelizadora. El nuevo obispo, por cierto, ya ha admitido que centrará su pastoral en la defensa de los “derechos humanos básicos como el derecho a la vida, el trabajo digno, la vivienda y la libertad religiosa”, tal y como puso de manifiesto en su toma de posesión en la Santa Iglesia Catedral de Córdoba.
A lo largo de todos estos años, la Iglesia Católica también se ha expandido en Córdoba con la construcción de hasta una decena de parroquias en diferentes barrios de la capital. Una de las últimas fue la de Huerta de Santa Isabel, la iglesia de San Juan Pablo II, en el año 2022, o la más reciente, de enero de 2025, que ha sido la parroquia de San Gregorio en la barriada periférica de Majaneque. A estos templos hay que añadir otros nuevos como la del Beato Cristóbal de Santa Catalina en Poniente en 2020, entre otros.
En este repaso también hay que destacar el trabajo que ha llevado a Cáritas a lo largo y ancho de la provincia córdoba. La crisis económica de 2008 provocó que se multiplicaran las peticiones de ayudas a esta entidad, al elevarse el número de cordobeses sin empleo y su respuesta fue, ha sido y es siempre, dentro de sus posibilidades, casi inmediata; además en los últimos años también ha incrementado sus programas de atención, ayuda y de empleo con la puesta en marcha de empresas como Solemcor. Como dato, solo en el ejercicio de 2024 –última cifra hecha pública hasta el momento– Cáritas atendió a casi 20.000 personas.
En el lado económico, la Diócesis de Córdoba presenta unas cuentas saneadas cada año. Las últimas cifras hechas públicas, por ejemplo, correspondientes al ejercicio de 2024 desvelaron que la Iglesia ingresó en 2024 casi 12 millones de euros, mejorando los ingresos del año 2023 en más de medio millón de euros. Por cierto, que la principal fuente de ingresos proviene de las aportaciones de los fieles a través de la asignación tributaria que representan 5, 8 millones de euros, más la Seguridad Social del clero.
En el lado internacional, hay que reseñar la presencia de misioneros cordobeses por casi todos los países del mundo, por recóndito que se encuentren, y el trabajo incansable del cordobés Juan José Aguirre, obispo de la Diócesis de Bangassou, en la República Centroafricana, donde llegó hace ya casi medio siglo de vida y cuya fundación recauda fondos para realizar numerosos proyectos en un lugar castigado por la guerra y la pobreza con numerosas iniciativas en Córdoba. En este ámbito también hay que destacar la misión diocesana de la parroquia de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro en Picota (Perú).
Así las cosas, la Diócesis y la Iglesia en Córdoba permanece viva un cuarto de siglo después de que El Día de Córdoba saliera a la calle y sigue afianzada en gran parte de la sociedad cordobesa. Además, en estos 25 años han crecido los movimientos eclesiales de atención a la familia y se ha puesto en marcha, entre otros proyectos, la Fundación Diocesana Santos Mártires que cuenta con 17 centros educativos y alrededor de 5.000 alumnos tanto en la capital como en la provincia. A todo ello hay que añadir el movimiento cofrade, tanto de la capital, como de la provincia de Córdoba, que mueve a miles de personas en torno a la Iglesia católica.