Una compleja maraña de asfalto

Una compleja maraña de asfalto. Así se podría definir un mapa de carreteras de la provincia de Córdoba a tenor de la amplia red viaria que se extiende por el territorio a modo de laberinto y cuya titularidad se reparten entre el Gobierno central, la Junta de Andalucía o la Diputación Provincial. Los números globales que maneja el Ministerio de Fomento revelan que Córdoba es la sexta provincia española y la primera de Andalucía con mayor longitud de kilómetros de carretera en su territorio, o lo que es lo mismo, 4.696 kilómetros de vías. Por delante se sitúan Lugo (6.379), León (6.036), Asturias (5.052), Burgos (5.043) y Badajoz (4.873).

Pero además de los datos generales, la red provincial cuenta con una serie de particularidades, como son las características de cada itinerario. Así, resulta que 4.490 kilómetros son carreteras de una calzada, 23 corresponden a recorridos de doble calzada y 183 corresponden a autovías. La estadística también determina que las mayoría de las vías de una calzada (2.899 kilómetros) tienen una anchura de entre cinco y siete metros; 366 kilómetros miden menos de cinco metros y 1.225 superan los siete metros de amplitud.

En cuanto a qué administración es la competente de la gestión y mantenimiento de la red, el Gobierno central, a través del Ministerio de Fomento, es el responsable de los recorridos de mayor capacidad que atraviesan la provincia, aunque en extensión hay otras administraciones con más patrimonio en este sentido. El Estado cuenta en Córdoba con 596 kilómetros de carreteras, más que en ninguna otra provincia de la comunidad andaluza. Ese total se divide a su vez en 418 kilómetros de viarios de una sola calzada, cinco de doble calzada y 173 kilómetros de autovía (en este caso la A-4 y la A-45).

En cuanto a la Junta de Andalucía, tiene la titularidad sobre 1.648 kilómetros de itinerarios en suelo cordobés, aunque la provincia andaluza con una red autonómica más amplia es Sevilla, seguida de Córdoba. Del global que corresponde a la ahora denominada Consejería de Fomento, 18 kilómetros son carreteras de doble calzada y sólo diez de autovía (que es el tramo de la Autovía del Olivar que va entre Lucena y Cabra). No obstante, la mayoría de carreteras de la Junta son de una calzada, concretamente 1.620 kilómetros.

La administración con más volumen de carreteras en la provincia es la Diputación. De hecho, es la tercera de España en longitud de vías, solamente superada por la institución provincial de Lugo (4.208) y la de León (3.310). La de Córdoba es la tercera con 2.452 kilómetros de red. En su totalidad son viarios secundarios, que unen distintos núcleos de población y que facilitan el acceso a numerosas zonas rurales de la provincia.

Al margen de los catálogos oficiales -aunque también son vías de comunicación- se encuentran los caminos rurales, que también forman parte de ese laberinto y que son esenciales para sectores productivos como la agricultura o la ganadería, principalmente. Conocer con precisión cuál es la longitud de todos los caminos de la provincia es una tarea complicada, ya que la mayoría de ellos pertenecen a la Diputación, otros son de titularidad municipal y muchos de propiedad privada, aunque de uso público. Sólo la institución provincial cordobesa cuenta con 635 kilómetros de vías rurales.

Pese a ser una de las provincias española con más carreteras, el Ministerio de Fomento sigue teniendo pendientes diversas actuaciones en Córdoba, que vendrían incluso a ampliar ese catálogo. Para ello, el Gobierno tiene diseñado el Plan de Infraestructuras, Transporte y Vivienda 2012-2002 (Pitvi), el mismo que, sin embargo, no prevé a corto o medio plazo resolver las infraestructuras viarias pendientes en Córdoba. Los datos que ha facilitado el propio departamento que dirige Íñigo de la Serna, que dejan los proyectos de la provincia en fases de redacción y aprobación de documentos, muy anteriores a lo que es la ejecución real. Entre las obras incluidas en ese plan hay dos de especial importancia, como son la terminación de la Variante Oeste de Córdoba, en el tramo que queda entre la carretera del Aeropuerto (N-437) y la de Palma del Río (A-431), y la autovía A-81, que cruza la provincia de norte a sur y que deberá unir Badajoz, Córdoba y Granada, sustituyendo así al actual trazado de la N-432. A estas dos actuaciones se unen las variantes de la N-502 a su paso por las localidades pedrocheñas de Alcaracejos, El Viso y Santa Eufemia, que tampoco se acometerán a corto plazo. En este caso, la respuesta de Fomento es que se trata de "proyectos en redacción, que requieren tramitación ambiental".