La Federación Provincial del Comercio alertó ayer de las escasas ventas que se están registrando en las tiendas de ropa y calzado debido a la crisis económica que padecen los consumidores y al retraso en la llegada del calor.

El presidente de la federación, Francisco Román Amor, explicó que los malos datos económicos que se están registrando provocan una considerable bajada en el consumo, porque la gente "no compra, o si va a las tiendas lo hace con muy poca alegría". Román Amor subrayó también "el gran daño" que esta situación, unida al retraso en la llegada del calor, "está haciendo a las tiendas de moda y de género de temporada, fundamentalmente ropa y calzado", que esperan "que el tiempo cambie cuanto antes". Las pérdidas que pueden llegar a registrar los comercios por estos motivos "son todavía difíciles de calcular", según el presidente de la federación, quien reconoció que la llegada inminente de las rebajas genera aún más incertidumbre entre los comerciantes, ya que hay más probabilidades de que los usuarios esperen a que éstas lleguen para comprar.

Para Román Amor, el descenso de las ventas ya se ha producido en otras ocasiones, "pero este año es peor porque la gente no está comprando como antes, sólo nos queda esperar a que los clientes se decidan a consumir antes de las rebajas". "Junio es una incógnita, no se sabe lo que puede pasar, sólo sabemos que se ha juntado todo, llueve sobre mojado", indicó. Apuntó que "aunque se habla de desaceleración, no se han puesto en marcha medidas efectivas" y añadió que "quizás la Junta sí ha previsto alguna pero a nivel nacional pocas".