El comercio acapara el 45% de la economía cordobesa y la industria tan sólo el 7%

Casi dos de cada cuatro empresas de la capital se dedican al comercio o la hostelería y tan sólo un 8% a la industria, bien sea manufacturera, de transformación de metales o de mecánica de precisión, según los datos de un informe en soporte CD-Rom sobre las Actividades económicas de Córdoba y su provincia que ha elaborado la Cámara de Comercio con el fin de facilitar información a los emprendedores. El estudio constata así que la ciudad basa su economía en el sector terciario, algo que ocurre en toda la geografía provincial pero que es menos acusado en otras ciudades medias como Lucena, Montilla o Priego de Córdoba. Como dato significativo baste decir que tan sólo hay en Córdoba un epígrafe económico en el que estén dadas de alta más de 1.500 empresas y es el que se refiere a bares, restaurantes, cafeterías, pubs y otros establecimientos de ocio similares. Asimismo, por encima de las mil tan sólo se encuentran las promotoras de viviendas (1.032) y las firmas dedicadas a los transportes de mercancías (1.299), seguidas, aunque de lejos, por las tiendas dedicadas al vestido (804), los supermercados y puntos de venta de alimentos en general (514), los electrodomésticos (343) o las empresas joyeras (167). Las actividades industriales, por contra, en ningún caso superan las cien empresas por epígrafe.

El pastel de la economía cordobesa se muestra de este modo poco diversificado, ya que, aparte de los comercios y restaurantes, tan sólo tres actividades consiguen acaparar más de un 5% del total de empresas. Se trata, en concreto, de las instituciones financieras y de seguros -que significan un 15,5% del total-, el transporte de mercancías y las comunicaciones -ámbito al que se dedican el 7,48% de las compañías - y la construcción -un sector ahora en recesión pero que supone todavía un 8,96%.

En cuanto al sector secundario, de ese 7,99% que significa, tan sólo un 1,68% se refiere a industrias pesadas de transformación de metales o maquinaría, ya que el propio informe reseña que el 6,31% de las mismas están dedicadas a las manufacturas. La ganadería, las empresas orientadas hacía la captación de energías o las de extracción de minerales son casi inapreciables y apenas consiguen entre todas un 1 %.