Córdoba ha redoblado en el último año su apuesta por los vehículos híbridos y eléctricos. Los cordobeses cada vez son más conscientes de la importancia de reducir, a cero, las emisiones de dióxido de carbono (CO2) y eso obliga a introducir unos cambios en los hábitos de consumo para poder contribuir a la conservación del medio ambiente.

Esta es una de las razones por las que muchos “se pasan a lo eléctrico”, pero no es la única ventaja. A la hora de circular en ciudad, hay calles que tienen el tráfico restringido y el vehículo eléctricoc es un pase para poder transitar. Además, en lugares públicos como centros comerciales y vías céntricas hay aparcamientos reservados para este tipo de coches, y lo más interesante para algunos es que en determinadas áreas de parking de pago o zona azul pueden estacionar de manera gratuita.

Ventajas que empiezan a verse reflejadas en el mercado. En lo que va de año se han matriculado en Córdoba 1.005 coches híbridos y otros 196 eléctricos. Estas cifras, proporcionadas por la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), suponen que las ventas se han duplicado con respecto al año pasado en las mismas fechas. Hasta agosto de 2020 se habían vendido en Córdoba 491 vehículos híbridos y 84 eléctricos.

Los medios de transporte propulsados con gas también presentan una tendencia al alza. El pasado año se vendieron 27 unidades hasta agosto y este año ya se han matriculado 95. Aunque todavía no son comparables con la venta de coches tradicionales, estas cifras son relevantes en una época complicada para el sector, ya que las nuevas matriculaciones cayeron en picado con la llegada del covid y a los concesionarios les está costando remontar: este año solo han presentado una subida de un 2,97%. Hasta agosto de 2020 se vendieron en Córdoba un total de 4.549 turismos y todoterrenos, y hasta agosto de 2021 se han matriculado 4.684, según los datos facilitados por Faconauto.

Así, por cada cuatro coches convencionales, ya se vende uno híbrido o eléctrico en la provincia. Y en ello también influyen las facilidades para su adquisición y financiación, ya que hay subvenciones para aquellas personas que deciden dejar atrás el combustible. Así lo explica Pepe Martos, director gerente de Toyota en Córdoba, que recuerda que este tipo de vehículos tienen dos ventajas fundamentales: emiten menos CO2 a la atmósfera, “una cuestión cada vez más importante”, y su coste es “bajo”, además de que el mantenimiento es mucho más económico, y “el porcentaje de reparaciones es menor”.

También suponen una ventaja en cuanto a impuestos, dado que hay algunos que son más económicos para ellos y otros que no tienen que pagar. Por ejemplo, en el impuesto sobre vehículos de tracción mecánica del Ayuntamiento de Córdoba, según recoge la Ordenanza Fiscal número 302, “se concede una bonificación del 75% de la cuota de los vehículos que, por las características de la energía utilizada o empleada para su funcionamiento o de los motores de que vayan provistos, tengan en el ambiente una nula incidencia contaminante, tales como los eléctricos”.

A su vez, tienen una bonificación de un 25% de la cuota, durante los tres primeros años de matriculación, “los vehículos híbridos con motor eléctrico-gasolina, eléctrico-diesel, o eléctrico-gas que estén homologados de fábrica, incorporando dispositivos catalizadores, adecuados a su clase y modelo, que minimicen las emisiones contaminantes” y los vehículos bi-fuel que utilicen como carburante el Autogas. Por otro lado, el impuesto de matriculación va en función de las emisiones de CO2 del vehículo y “como los híbridos y eléctricos no contaminan, están exentos de pagarlo”, detallado Martos. 

El director de Toyota en Córdoba muestra el funcionamiento de un coche híbrido.

Luego está el plan Moves de la Junta de Andalucía, que impulsa a aquellos que quieren invertir en un coche eléctrico con incentivos para particulares, autónomos, administraciones y empresas de hasta 7.000 euros si se adquiere un turismo eléctrico puro, de autonomía extendida o híbrido enchufable con una autonomía superior a 90 kilómetros, y se achatarra otro con más de siete años de antigüedad. La ayuda se sitúa en 4.500 euros si no se cumple el requisito del achatarramiento. Además, particulares y autónomos podrán instalar puntos de recarga con un 70% de ayuda, que sube al 80% si se localiza en un municipio de menos de 5.000 habitantes.

Estas son las ayudas del plan Moves III, que se podrán solicitar a partir del próximo 20 de septiembre, pero la convocatoria de la anterior edición todavía se encuentra abierta y todas aquellas personas interesadas podrán solicitarla hasta el 17. Las ayudas del plan Moves II oscilan entre 600 euros para cuadriciclos ligeros eléctricos puros y 15.000 para furgones o camiones N3 y autobuses o autocares M3 enchufables o de pila de combustible, situándose en 5.500 euros para turismos eléctricos con una autonomía mayor de 90 kilómetros solicitados por particulares y entidades públicas, siempre que se aporte un vehículo para achatarrar. Si no, el incentivo será de 4.000 euros. Otros vehículos específicos y empresas también podrán acogerse a ellas. La información se puede consultar en la página de la Junta, donde aparece también cómo solicitar las ayudas.

Las 'electrolineras' se abren paso en la ciudad

Con todo esto, ya hay empresas como Toyota que presentan unas cifras favorecedoras para el medio ambiente. El 90% de las ventas de la firma en Córdoba se corresponden con este modelo. Esto se debe, principalmente, a que “todos los modelos que ofrecemos, a excepción de los todoterrenos y todocaminos, son híbridos”, explica el director gerente de la marca.

Un paso por detrás se mantienen los eléctricos, a pesar de su cada vez mayor presencia. Hace unos años, los conductores eran más reticentes a la hora de cambiarse a estos nuevos modelos porque había muy pocos puntos de recarga, pero actualmente existen en casi todos los concesionarios. Además, muchos centros comerciales o gimnasios también los están incorporando, y están llegando para quedarse las electrolineras, que son puntos de recarga en gasolineras que las propias compañías instalan.

Sin ir más lejos, en Córdoba se ha producido este año un gran incremento de puntos de recarga, incluyéndolos en instituciones como en Ayuntamiento. El precio de la recarga dependerá de la compañía, si bien en algunos casos es tarifa fija y en otros, al igual que en los hogares, depende de otros muchos factores y puede variar en función de la hora.