Los colegios que pertenecen a la red de centros concertados todavía no han recibido de la Consejería de Educación las partidas presupuestarias correspondientes al cuarto trimestre del pasado año, un periodo que coincide en el tiempo con el primero del curso actual. Esto, sin duda alguna, supone un contratiempo para la dinámica y el funcionamiento diario de estos centros docentes ya que en esa asignación que se conoce como la de Otros Gastos se incluyen los fondos correspondientes al pago del personal de administración y servicios (PAS) y otros tipos de desembolsos necesarios para el funcionamiento del colegio. Se trata de una denuncia que ayer hicieron las patronales de colegios concertados Escuelas Católicas y la Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE-Córdoba). Ambas incidieron en las molestias y los graves perjuicios que genera este retraso en el pago de esta cuantía. Esta demora también afecta a los colegios concertados que dependen de cooperativas.

Fuentes de Escuelas Católicas, organización que agrupa a más de medio centenar de centros en la provincia de Córdoba, señalaron a El Día que normalmente la Administración autonómica hace los pagos "a trimestre vencido", si bien, incidieron en este nuevo retraso. Según las fuentes consultadas por este periódico, este tipo de pago tiene carácter trimestral, aunque por ley deberían ser mensuales. Las patronales llegaron en su día a un acuerdo por el que se pactó que los pagos se iban a hacer a mitad de cada trimestre. Así las cosas, el último abono del año pasado, según aquel acuerdo, debería haberse hecho a medianos del pasado mes de noviembre. Y lo peor es que, según indican desde Escuelas Católicas, es que desde el departamento que dirige Luciano Alonso "no nos dicen cuándo nos van a pagar".

De esta asignación económica dependen partidas como el pago de las nóminas del personal laboral, la luz, el teléfono o la calefacción de los centros. En muchos casos, según Escuelas Católicas, los colegios tienen que acudir a sus recursos propios para hacer estos pagos e, incluso, en algunos casos recurren a entidades financieras para poder hacer frente a estos pagos.

La situación que atraviesan los colegios que forman parte de CECE-Córdoba es la misma. Según explicaron desde esta patronal, la Consejería de Educación tampoco ha abonado la parte correspondiente del pago y lamentaron esta nueva demora. Aseguraron también que es una situación que afecta a todos los colegios de Andalucía

No es la primera vez que ambas patronales denuncian los impagos por parte de la Administración autonómica. Por ejemplo, ya en 2012 denunciaron que la deuda de la Junta superaba los siete millones y medio de euros, una cuantía que correspondía a pagos sin efectuar de 60 centros concertados. Ambas organizaciones mantienen un concierto con la Junta para el sostenimiento de los centros concertados en el que se incluyen tres partidas: el salario del personal docente, incluidas las cotizaciones a la Seguridad Social; los gastos variables, que incluyen partidas como sustituciones, antigüedad, función directiva y obligaciones sindicales; y otros gastos, que comprenden los ya citados sueldos del personal de administración y servicios, los gastos ordinarios de mantenimiento, conservación y funcionamiento de los centros. Las dos primeras partidas se abonan directamente como pago delegado de la Consejería de Educación y la correspondiente a otros gastos se paga por trimestres y es la que más problemas presenta cada año.

A pesar de la denuncia hecha por Escuelas Católicas y CECE-Córdoba, fuentes del área que dirige Manuela Gómez aseguraron que la Junta "está al corriente de pago" con los centros.

Ambas patronales, por otra parte, también aludieron ayer a la convocatoria de la Consejería de Educación para solicitar acogerse al régimen de conciertos educativos o la renovación o modificación de los mismos a partir del curso académico 2014-2015. La convocatoria es, en realidad, una revisión de la renovación que por cuatro años que se realizó en septiembre del año pasado. Ésta es la razón principal por la que no se esperan demasiadas modificaciones en el número de unidades concertadas, si bien se espera que se adecuen plazas de apoyo a la integración.

Las patronales también intentarán que la Consejería de Educación apruebe el concierto de las aulas de Bachillerato, una demanda a la que la Junta de Andalucía se suele resistir.

Desde Escuelas Católicas reconocieron que aún no tienen contabilizadas las plazas que demandarán ante la Junta, si bien, adelantaron que parte de su petición se centrarán en las aulas de educación especial y de apoyo a la integración, una de sus grandes demandas año tras año.

Los colegios tienen de plazo hasta el próximo 31 de enero para trasladar sus peticiones a la Junta de Andalucía. Según establece la orden publicada por la Consejería de Educación, los conciertos educativos que se acuerden tendrán la duración de tres años, sin perjuicio de aquellos que, para garantizar la continuidad en la escolarización del alumnado del propio centro, tengan la duración de un año. A esta misma orden de la Consejería de Educación se pueden presentar los centros educativos que hasta ahora imparten el modelo pedagógico diferenciado por sexo, lo que les valió la retirada del concierto por parte de la Junta de Andalucía en base a resoluciones judiciales que rechazaban conveniar este patrón con fondos públicos. Todos preparan ya la documentación para volver a solicitar la subvención pública este año, entre ellos, los cordobeses Torrealba, ubicado en Almodóvar del Río, Yucatal, en Posadas, y Zalima, en la capital.