Los 14 centros cívicos de Córdoba capital volverán a reabrir sus puertas por la tarde a partir de este jueves 1 de octubre. Así lo ha anunciado la delegada de Participación Ciudadana, Eva Contador, quien ha detallado varias medidas a tener en cuenta a la hora de poder hacer uso de estos espacios.

Por un lado, Contador ha asegurado que se toma esta medida ante la petición de la ciudadanía y en un momento en el que se está en plena renovación de los órganos de participación ciudadana, lo que genera muchas reuniones.

Para una apertura vespertina segura, el Ayuntamiento ha contratado a una empresa especializada que ha estudiado el aforo de los centros cívicos y las medidas a tomar en cada uno de ellos, teniendo en cuenta las particularidades que diferencian a unos de otros.

Además, se ha contratado a dos personas por centro, es decir, a 28 controladores covid, que serán los encargados de velar por la normativa sanitaria.

El aforo de todos ellos queda reducido al 50%, según marcan las normativas del Gobierno central y del autonómico. Todas las medidas a aplicar variarán en función de las decisiones que en este sentido se tomen desde ambas administraciones.

Con respecto a los talleres a celebrar por las tardes, quedan prohibidos aquellos que supongan alguna actividad aeróbica, como danza o baile, aunque sí se mantendrán otros, como los de pintura o costura. Además, todos los talleres deberán realizarse sentados.

Abrirán también las salas de lectura para el estudio, pero no se permitirá la lectura de periódicos físicos. Los ordenadores, eso sí, estarán disponibles.

Las salas de reuniones quedarán reservadas para las asociaciones que soliciten cita previa, primando el uso por parte de las juntas municipales y de los consejos de distrito.

La Delegación de Participación Ciudadana publicará este mismo jueves un decreto detallando todas las medidas a tener en cuenta para poder hacer uso de estos centros por la tarde.

En cuanto a los centros cívicos complementarios, que vienen a ser salas de barrio habilitadas cuando el centro principal está saturado, su apertura dependerá si su uso es necesario. Aquí, eso sí, no suele haber personal municipal, tan solo personal de seguridad, e incluso son los propios vecinos los que abren y cierran las salas.