Catorce militares muertos en la historia de la Brigada Guzmán el Bueno X
Sucesos
El cabo Miguel Ángel Jiménez Andújar y el soldado Carlos León Rico han perdido la vida este jueves mientras realizaban un programa básico de instrucción en el medio acuático
Localizados los cuerpos de los dos militares desaparecidos en un lago haciendo maniobras en Cerro Muriano
La Brigada Guzmán el Bueno X (BRI), con sede en Cerro Muriano, ha vivido en las últimas horas una de sus jornadas más trágicas con la muerte de dos de sus efectivos mientras hacían maniobras este jueves 21 de diciembre. Con el fallecimiento de ambos, son ya 14 los militares que han perdido la vida en la historia de la Brigada Guzmán el Bueno X desde que se puso en marcha hace ahora 37 años.
Uno de los militares que ha muerto ha sido el cabo Miguel Ángel Jiménez Andújar, de 34 años de edad, estaba casado y era natural de Villafranca de Córdoba. Según la información facilitada por Cuartel General del Ejército, había ingresado como soldado en el Ejército de Tierra en 2011, siendo destinado al Regimiento de Infantería La Reina 2, donde permaneció tras ascender a cabo en 2019. Además, había participado en misiones en Letonia y Líbano y tenía dos cruces al mérito militar con distintivo blanco.
La segunda víctima de este accidente ha sido el soldado Carlos León Rico, de 24 años de edad, soltero y natural de Viso del Alcor (Sevilla), y que ingresó en el Ejército de Tierra el pasado 8 de mayo.
"La investigación de las circunstancias que han rodeado al accidente está en manos de la autoridad judicial competente", ha añadido la Brigada.
Sin duda, uno hecho que ha causado una gran conmoción entre los integrantes del Ejército de Córdoba y que ha comenzado a primera hora de la jornada de este jueves, en concreto, mientras se estaban llevando a cabo unas maniobras militares en un entorno acuático en pleno Sierra Morena, con temperaturas de hasta 4 grados, concretamente en una zona junto al embalse de Guadanuño y que forma parte de las instalaciones militares.
Los militares fallecidos, naturales de las provincias de Córdoba y Sevilla, estaban realizando un programa básico de instrucción en el medio acuático junto al resto de compañeros, dos de los cuales han necesitado atención médica debido a los síntomas de hipotermia que presentaban.
El dispositivo de búsqueda, comandado por la Guardia Civil y en el que también ha participado el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas del Instituto Armado (GEAS), se ha centrado en una pequeña zona acuática donde se halló al primero de los militares hasta lograr encontrar también sin vida a su compañero. El primer cuerpo apareció en torno a las 15:00 y el segundo apenas dos horas más tardes, a las 17:00, según las fuentes a las que ha tenido acceso El Día.
El Ejército de Tierra ha confirmado el fallecimiento de ambos militares y, a través de las redes sociales ha lanzado un mensaje en el que ha lamentado "con profundo dolor el fallecimiento de dos militares de la Brigada Guzmán el Bueno X en el transcurso de unas maniobras en el Campo de Tiro y Maniobras de Cerro Muriano. "Todos los componentes del Ejército de Tierra nos unimos a su familia y compañeros en estos trágicos momentos. Miguel Ángel y Carlos D.E.P.", concluye el mensaje.
El Ministerio de Defensa, por su parte, también ha lanzado un mensaje en la misma red en la que también ofrece su "más sincero pésame a sus familiares, amigos y compañeros en estos dolorosos momentos".
14 muertes en 37 años
En sus 37 años de historia, la Brigada Guzmán el Bueno X (BRI X) ha perdido 14 efectivos en distintos actos. El primero de ellos, Antonio Martín-Palomino, soldado de Infantería, falleció el 24 de abril de 1987 al volcar el vehículo que conducía durante unas maniobras en el Campo de Tiro y Maniobras de Chinchilla (Alicante).
Tras él perdió la vida, el 15 de junio de 1992, mientras realizaba prácticas de explosivos en el Campo de Tiro de las Navetas de Ronda, Málaga, el soldado de ingenieros José Castro. El tercer miembro de la Brigada en fallecer en acto de servicio, el 14 de diciembre de 1993, fue el cabo de Infantería José Adelardo Manzaneque, durante unos ejercicios de tiro en el Campo de Tiro de Cerro Muriano. El cuarto fue el alférez de Infantería Alberto García Baigorri, quien falleció el 14 de octubre de 1999 al volcar el vehículo que conducía durante unos ejercicios tácticos en San Gregorio (Zaragoza). Junto a él murió el soldado José Manuel Arquinbau.
Posteriormente, el teniente Antonio Montalbán murió el 26 de enero de 1996 mientras realizaba prácticas con explosivos en el Campo de Tiro y Maniobras de Cerro Muriano. Ese mismo año –el 20 de mayo– ETA asesinó en la avenida Carlos III de Córdoba al sargento Miguel Ángel Ayllón. Luego, el 28 de septiembre de 1988, perdió la vida cuando se dirigía al campo de maniobras de San Gregorio el sargento de Artillería José Bernardo Domínguez.
Ya en misión, murieron el 8 de agosto de 2001 los sargentos de Infantería Juan Cepedello y Enrique de la Rosa. Ambos sufrieron un accidente con el vehículo blindado en la fase de concentración para la misión humanitaria en Bosnia-Herzegovina. Después, el 17 de octubre de 2007 perdió la vida el cabo de Infantería Antonio Jesús Bonilla, al sufrir un accidente de tráfico con el vehículo Aníbal, en el desarrollo de una misión humanitaria en Kosovo. El último en morir, el 28 de enero de 2015, el cabo Francisco Javier Soria. Ocurrió mientras cumplía misión como casco azul de las fuerzas de la ONU en Líbano y “recibió fuego hostil que acabó con su vida”, destacaban entonces desde la Brigada Guzmán el Bueno X. La ONU confirmó que los disparos provenían del Ejército israelí.
De esta triste lista de fallecidos han pasado a formar parte este 21 de diciembre Miguel Ángel Jiménez Andújar y Carlos León Rico. DEP.
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