Córdoba disfruta desde primera hora de la tarde de un magnífico Martes Santo, con todas las cofradías en la calle. El calor ha sido la nota predominante en las salidas de las seis hermandades. Tumultos de día grande se han vivido en la plaza de Capuchinos y en María Auxiliadora, de las que han salido la cofradía del Císter, con su paso de Misterio y su Dolorosa, y el Prendimiento, que, como cada año, ha estado arropado por cientos de alumnos y exalumnos del Colegio Salesiano.

La Catedral y la carrera oficial están siendo de nuevo el punto central del recorrido, algo que en cierto modo no es nuevo ya que las cofradías del martes son habituales en el principal templo de la Diócesis desde hace varios años. Desde allí, desde la Mezquita, salió la Agonía, que en breve abandonará la carrera oficial para enfilar con paciencia hacia el Naranjo, donde de madrugada la recibirá su barrio. Algo antes que ella hizo acto de presencia la Universitaria, desde la iglesia del Juramento, y el Buen Suceso, que este año, por los nuevos recorridos establecidos, se ha dejado ver por la Plaza de la Corredera en una imagen para el recuerdo. La Sangre también salió apenas pasadas las cinco de una abarrotada plaza de Capuchinos, que comienza a vivir sus momentos estelares.

Ya con el sol más bajo, y con las temperaturas algo más amables, le llegó el turno a las dos últimas en salir. Primero, la Santa Faz, que vuelve a llevar el espíritu trinitario y que va acompañada por esa delicia que es la Banda Tubamirum de Cañete. Desde los Salesianos, y rodeados del gentío jubilar que se agolpa en los alrededores de la calle María Auxiliadora, hizo su espectacular acto de aparición el monumental misterio del Prendimiento y la Dolorosa de Martínez Cerrillo.

Entre los estrenos del día destaca el nuevo calvario de la Universitaria, que ha diseñado el profesor de Historia del Arte Alberto Villar Movellán, o el nuevo juego de albas y dalmáticas de la Santa Faz. En La Sangre ha sonado, tras salir la Reina de los Ángeles, el himno español con los arreglos del compositor jerezano Germán Álvarez Beigbeder. Volverá a escucharse esta noche en su regreso, cerca de la medianoche.