La brecha salarial entre mujeres y hombres se situó en la provincia de Córdoba en el 22,9% en 2015, último año del que se tienen cifras oficiales, según se recoge en el informe elaborado por la Secretaría de la Mujer de CCOO de Andalucía con motivo del Día de la Mujer. En cifras total, el informe indica que las cordobesas ganaron 3.430 euros menos anuales de media que los hombres. La secretaria de la Mujer de CCOO de Córdoba, Evangelina Cabanillas, señaló que la brecha salarial se ha visto "agravada en los últimos años como consecuencia de la crisis, las políticas de recortes y por los cambios legislativos introducidos por la reforma laboral de 2012", algo que ha generado "una devaluación salarial más profunda que la que se estaba produciendo en el mercado laboral".

En este caso, el menor salario de las mujeres puede explicarse mediante los factores que condicionan su acceso laboral en igualdad con los hombres y el logro de un sueldo similar, como el tipo de jornada y de contrato, el nivel educativo o la ocupación. El sindicato detalló que "mientras el 8% de los hombres trabaja a jornada parcial en Córdoba, esta cifra se incrementa hasta el 26,3% en el caso de las mujeres, que solo disfrutaron del 2,97% de los 5.554 contratos indefinidos que se formalizaron el pasado año en la provincia.

Además, las mujeres se concentran en sectores y ocupaciones en las que las remuneraciones son "más bajas y las oportunidades de formación y de carrera profesional son limitadas", indicó Cabanillas. El trabajo a tiempo parcial implica menor salario, no solo por el número de horas trabajadas, sino también porque se cobra menos por hora, ya que en el caso de las mujeres, las que trabajan a jornada parcial cobran un 26% menos por hora que las que lo hacen a tiempo completo, según el informe de Comisiones. En términos de ganancia por hora, la brecha salarial entre ambos sexos es menor en el grupo de ocupaciones de directivos, técnicos y profesionales y técnicos de apoyo que en el grupo de administrativos, servicios, trabajadores cualificados agricultura, construcción e industria o trabajadores no cualificados.

"Todo ello unido a que las mujeres asumen, casi en exclusiva, las tareas de cuidados, condiciona su desarrollo profesional", remarcó Cabanillas, quien afirmó que "la lucha contra todas las discriminaciones de género laborales y sociales, que se visibilizan en la brecha salarial, debe ser una prioridad". En este sentido, la responsable sindical hizo hincapié en que "es necesario un cambio del modelo productivo y actuar decididamente para eliminar la segregación laboral por razón de género a través de medidas que fomenten el valor de las actividades feminizadas".

Así, en opinión del sindicato, "se debe impulsar la contratación indefinida a jornada completa, negociar planes de igualdad de calidad basados en la realización de diagnósticos objetivos, con análisis de las retribuciones, desglosadas por salario base y diferentes complementos y, por supuesto, la derogación de las reformas laborales".