Cajasur presentó ayer un avance de sus resultados de negocio de 2008 coinciendo con el nombramiento del nuevo director general, Antonio Barral. La entidad cerró el pasado ejercicio con un incremento del volumen de negocio del 2,4%, aunque no se especificaron cantidades concretas por parte de la caja. Sin embargo, el beneficio neto individual -sin contar las empresas participadas- ascendió a 51,3 millones de euros, un 35% menos que en 2007, cuando se alcanzaron los 80 millones de euros en este mismo concepto contable. Aparte, fuentes de la caja aclararon en este avance de cifras que el beneficio recurrente cayó menos que el neto, un 21,9%, como consecuencia de los ingresos provenientes de la operaciones con Metrovacesa. Desde la entidad manifestaron ayer que esta caída del beneficio es resultado de la aplicación de criterios de "elevada prudencia" y con el fin de fortalecer el balance y contar así con mayores reservas para el futuro. Así, explica la caja, se crean más fondos de provisión para dar más solvencia patrimonial a la entidad ante la situación económica actual. Esto mantendrá el nivel de capitalización de la entidad muy por encima de los mínimos exigidos, según indicó la caja. Y es que la caída del beneficio está además en la línea de la que están experimentando otras entidades de ahorro, que sitúan este descenso entre el 25 y el 40%, unos número "normales" en los tiempos que corren.

Esto datos se conocen justo cuando se produce un nuevo relevo en la dirección general de la entidad. Antonio Barral ocupa el cargo que deja Carlos Senent después de haber permanecido tan sólo cuatro meses en el mismo. La entidad cordobesa reconoció ayer en un comunicado que el relevo de Carlos Senent obedece "a la disparidad de criterios con los órganos de gobierno sobre el modelo de gestión del negocio". Este hecho, según la caja, "ha propiaciado una pérdida de la confianza depositada en este ejecutivo, que se incorporó a la entidad el pasado 30 de septiembre.

Cajasur indicó también que el consejo de administración acordó ayer de manera unánime nombrar a Antonio Barral para desempeñar el cargo por el que han pasado tres directivos en menos de dos años. Según la entidad, "Barral conoce a la perfección la caja tras haber desarrollado durante los últimos años una brillante carrera profesional en distintas áreas de negocio desde su incporación en el año 2000" procedente de la firma Arthur Andersen. Ya en la caja, Barral ha desempeñado distintos cargos como el del subdirector general de Auditoría, Coordinación y Estrategia, Intervención de la División Corporativa, Organización y Procesos.