Balance

La tecnología IOT constata el aumento de público y de ventas en la Feria del Libro de Córdoba

  • La 47 edición cierra con 26.787 visitas y un 13% más en libros vendidos respecto a 2019

Marián Aguilar, Rafael Ruiz y Lourdes Arroyo hacen balance de la 47 edición de la Feria del Libro.

Marián Aguilar, Rafael Ruiz y Lourdes Arroyo hacen balance de la 47 edición de la Feria del Libro. / El Día

La 47 edición de la Feria del Libro de Córdoba se puede catalogar como un "éxito", tanto en número de asistentes como en ventas. No son impresiones meramente visuales, sino que son "datos fiables" recogidos mediante el sistema tecnológico IOT, impulsado desde la delegación de Transformación Digital para medir el aforo, y por las estadísticas que los propios libreros han reconocido para cuantificar las ventas.

Casi una semana después de que finalizara la feria en el Bulevar del Gran Capitán, el Consistorio ha presentado el primer balance de la historia con datos reales que se tiene respecto a la afluencia de público en la Feria del Libro de Córdoba y que cerró el pasado 1 de mayo con un total de 26.787 visitas. Para ello, ha sido necesario implantar dos sensores en ambos lados de las casetas y en cada uno de los extremos. En comparación con la edición de 2019, de la que los datos son simples estimaciones, el aumento de asistentes ha sido de un 20%. 

"Sin lugar a dudas, los dos años de ausencia han provocado, y así lo hemos notado, el deseo de volver a reencontrarse y recuperar la fiesta de la lectura", ha señalado la delegada de Cultura, Marián Aguilar, como una de las razones que quizás haya influido en estos datos. Otro motivo, no menos importante, ha sido el de compartir fechas con la Cata del Vino, con las Cruces de Mayo y con la Batalla de las Flores, ha apuntado la delegada. 

La programación cultural de la feria también ha tenido "un gran seguimiento", según ha valorado Marián Aguilar, e incluso ha habido momentos de "lleno absoluto" en tanto que se han visto "desbordados". De esto también hay datos, aunque en este caso han sido contabilizados por los responsables de organización, entre los que se encuentra Rafael Ruiz que los ha calificado de "espectaculares". 

A las actividades infantiles, sobresaliendo el interés por los talleres y los encuentros con autores, han asistido 1.628 personas; mientras que a las actividades para adultos, principalmente las presentaciones de libros, han acudido 1.745 personas. Un total de 3.373 asistentes y participantes. Entre los autores que han tenido mayor seguimiento se encuentran -en orden de más a menos afluencia- el historiador cordobés Antonio Barragán, el periodista Manuel Jabois, Alejandro López Andrada y Luis Landero.

Un 13% más en ventas

El volumen de ventas también se ha mejorado respecto a las ediciones de 2019 y 2018, que fueron consideradas de forma positiva por los libreros. Concretamente, este año se ha aumentado hasta un 13% en la cantidad de libros vendidos, con picos del 65% en algunos casos excepcionales, ha confirmado Rafael Ruiz.

De acuerdo al seguimiento en las presentaciones, Antonio Barragán se ha convertido en la firma más vendida en las casetas de la feria con su ensayo Enterado. Justicia Militar en Córdoba 1936-1945 editado además por la editorial cordobesa Utopía. En segundo lugar "se ha colado" un título que no ha tenido promoción en la feria, Roma soy yo: La verdadera historia de Julio César de Santiago Posteguillo. El podio lo completa Una Historia Ridícula de Luis Landero, una de las grandes apuestas hechas por la organización. 

Por su parte, la delegada de Transformación Digital, Lourdes Arroyo, ha destacado que la infraestructura IOT, utilizada anteriormente en el Festival de Patios, supone la base de proyectos que se están poniendo en marcha para mejorar la planificación y programación de eventos en la ciudad, ya que conocer estos datos siempre es interesante para saber mejorar en futuras ediciones.

Respecto a las propuestas de mejora que algunos caseteros declararon a el Día en el cierre de la Feria del Libro sobre el "mal estado" de las casetas, la delegada de Cultura ha declarado que han sido fallos puntuales, en algunos casos causados por la lluvia, y que entran dentro de lo normal porque no son puestos fijos.

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