Tras cuatro años largos de un tortuoso camino judicial parece que desde ayer los antiguos Laboratorios Pérez Giménez van a poder ver la luz al final del tunel. Y es que ayer se dio un paso importantísimo para ello gracias a la firma del acuerdo de venta suscrito por los administradores concursales que gestionan la empresa desde que en marzo 2012 cayera en concurso de acreedores y la multinacional que en junio de 2014 resultó vencedera de la subasta de la misma, Globalareonautic. La rúbrica, que también han suscrito los sindicatos UGT y CTA, se llevó a cabo en el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Córdoba y ante el magistrado jefe titular del mismo, Antonio Fuentes, quien ha sido decisivo para que las partes al final hayan llegado a un acuerdo en un conflicto que estaba enconado.

A partir de ahora se ha abierto un plazo hasta el próximo 11 de mayo para la firma de las escrituras "Si se puede firmar antes, se firmará antes", indicó el juez. No obstante, Globalareonautic ha solicitado una autorización para que haya a partir del próximo 1 de abril un grupo de trabajadores en la fábrica con el objetivo de su limpieza y mantenimiento, "para que vayan preparando el desembarco de la adjudicataria", tal y como detalló Fuentes. El titular del Juzgado de lo Mercantil número 1 de Córdoba recordó que la multinacional se ha comprometido a la recolocación, en un principio, de los 130 trabajadores de Pérez Giménez, 40 en un primer momento y el resto conforme se vayan necesitando. El plazo plateado para esta recolocación es de 22 meses. "Lógicamente, ahora hay que poner la planta en funcionamiento otra vez y pedir una serie de autoriazaciones y según vayan dándose esas autorizaciones podrá la planta comenzar a funcionar y se irá necesitando incorporar a más personal", añadió el juez. "Hay que esperar a que se den las oportunas autorizaciones por parte de las distintas administraciones y las agencias oportunas; el tema de la fabricación de medicamentos está muy regulado y la planta ha estado cerrada, por lo que se han ido perdiendo autorizaciones y requistos administrativos que tiene que poner en marcha ahora otra vez Globalareonautic", añadió. Globalareonautic se ha comprometido además a aportar diez millones de euros que le quedaban de los 11 por los que se le adjudicó la antigua empresa de Calmante Vitaminado mediante un cheque a 45 días. Esa cantidad se utilizará para pagar deudas a la Administración, a los acreedores, a trabajadores y a la Seguridad Social.

Tras la rúbrica, tanto UGT como CTA, en las personas de José Ruz y Pilar Regaño, respectivamente, se mostraron muy satisfechos del acuerdo alcanzado "por lo que significa para los trabajadores y para la industria en Córdoba". Y el portavoz de Globalareonautic, Antonio López, le dio las gracias en nombre de la multinacional a Antonio Fuentes por el desbloqueo del conflicto e insistió en que "ya sólo queda cumplir los plazos acordados en el documento y llegar a la firma de la venta final". "Tenemos un mercado internacional abierto, aparte del nacional, y llegamos con la intención de poner los laboratorios donde estaban; estos han sido los mejores laboratorios de España, con diferencia. Eran los mejores laboratorios de Europa y queremos que vuelvan a serlo", concluyó.