Accidente en la avenida de Cádiz: "El Cadillac se montó en la acera y suerte que lo paró un árbol, habría sido un desastre"

Los vecinos de la avenida de Cádiz, en Córdoba capital, continúan este domingo con el miedo en el cuerpo después de que, el sábado por la tarde, un vehículo invadiera el acerado, arrancara parte de la valla y colisionara contra el tronco de un árbol a la altura del número 81, junto al antiguo bar Yolanda. Como resultado del siniestro, uno de los ocupantes del vehículo falleció tras ser trasladado al Hospital Universitario Reina Sofía, y otros dos resultaron heridos de diversa consideración.

"El Cadillac se montó en la acera y suerte que chocó contra el árbol, porque podría haber sido un desastre", exclama uno de los testigos que acudió a socorrer a los heridos en aquellos primeros momentos. Eran las 16:30, y las numerosas terrazas de la zona estaban llenas como es habitual en esta época. De pronto, un gran estruendo e, instantes después, el caos: "No sabíamos qué había pasado, pero miramos hacia el lugar de donde vino el porrazo y vimos el coche estampado contra el árbol. Esa fue la suerte, porque si no se habría metido en las terrazas", dice otro.

Al lugar del suceso acudió la Policía Local, que acordó la zona, y efectivos sanitarios. Tras asistir a los tres heridos del siniestro -los tres viajaban en el vehículo accidentado-, fueron trasladados al Hospital Universitario Reina Sofía. Uno de ellos, de 83 años, falleció en el centro hospitalario, según precisaron fuentes sanitarias, mientras que otro de los heridos fue dado de alta el mismo sábado y el tercero sigue ingresado con heridas de diversa consideración, aunque no se teme por su vida.

"La barrera es decorativa"

La conversación este domingo en la avenida gira en torno a la falta de seguridad, coinciden los vecinos: "Es una recta muy larga y los coches cogen muchísima velocidad", se queja uno de los residentes en uno de los corrillos formados en torno a las vallas reducidas a un amasijo de hierros tras la colisión. Otro añade que, en efecto, sucesos como el del sábado no son extraños: "Siempre hay una parte de la valla derribada porque los siniestros son frecuentes. Necesitamos más seguridad, porque la barrera que nos separa de la carretera es simplemente decorativa, no está preparada para este tipo de golpes tan fuertes y que son tan frecuentes".

Una mujer residente en el número 81, a cuyas puertas se produjo la invasión del acerado, relata cómo fueron aquellos primeros momentos: "Me asomé por la ventana después de sentir un ruido muy fuerte y vi el coche contra el árbol y la valla arrancada. La gente de las terrazas se levantó y fue a ayudar, la gasolina se salía y se extendía por el suelo", recuerda. En el lugar permanece una gran mancha y el precinto policial, testigos de lo que ocurrió.

En las últimas semanas, los vecinos de los distintos barrios que componen el Distrito Sur han puesto en marcha una campaña de movilizaciones para exigir al Ayuntamiento que mejore la seguridad, la limpieza, la iluminación y las infraestructuras en la zona al sentirse "olvidados". Y la seguridad en la avenida de Cádiz, debido a la velocidad a la que circulan algunos conductores, es uno más de los puntos negros del largo listado.