Los vecinos de San Lorenzo, en el Casco Histórico de Córdoba, critican que las obras de construcción del itinerario peatonal del eje Realejo-San Lorenzo han significado una buena ocasión para reverdecer esta zona del centro y realizar una inversión europea en esta materia, pero "se han dilapidado en una gran parrilla de granito" que, a su juicio, "aseguran la gentrificación del espacio público para disfrute de veladores". 

Para la asociación vecinal San Lorenzo Existe, la zona es "un supuesto jardín sin vegetación y que se ha transformado en el epítome de la gentrificación" del Casco Histórico. "No se ha implementado la instalación de macetones con vegetación y árboles para impedir que esta gran parrilla incremente unos cuantos grados la temperatura, implantación de microbosques que no es sólo plantar un arbolito". Con todo ello, los vecinos afirman que en la zona "se facilita su ocupación por veladores versus disfrute de la vecindad".

El eje peatonal, que sufrió varios retrasos por la falta de materiales, "es una vía de alta velocidad", se quejan los vecinos, por "el riesgo de la velocidad excesiva" o bien la ocupación de márgenes que impiden el tránsito de las personas, aseguran. 

Eje peatonal San Lorenzo-Realejo tras las obras.

El Plan Estratégico Municipal de Adaptación al Cambio Climático elaborado y finalizado en 2018 "duerme en un cajón de algún concejal delegado o del alcalde", critican, y aseveran que "existen proyectos, manuales con una lectura comprensiva asequible" para resolver el problema y contar con árboles en este tipo de zonas; sin embargo, "Córdoba asa a su población y el granito parrillero prevalece".