La UCO congela el expediente de un millar de alumnos por falta de pago

La falta de recursos hizo que el pasado curso cerca de un millar de alumnos de la Universidad de Córdoba (UCO) no pudieran realizar sus exámenes. La razón no fue otra que el impago de sus matrículas, un hecho por el que la institución académica les congeló su expediente. La presidenta del Consejo de Estudiantes (CEU), Alejandra López de Sagredo, dio a conocer ayer estos datos e incidió en los efectos negativos de "congelar el expediente" a los alumnos. No en vano, comentó, los estudiantes no pudieron presentarse a la convocatoria de exámenes del mes de junio, perdieron esa posibilidad y, en el caso de abonar la deuda, tuvieron que esperar hasta el mes de septiembre para realizar las mismas pruebas.

Al respecto, el gerente de la UCO, Antonio Cubero, confirmó esas cifras y señaló que la tasa de impago que registró la institución académica por parte de los alumnos el pasado curso se cifró en un 6%.

Ambos hicieron estas declaraciones tras la firma del convenio entre la UCO y el BBVA que servirá para abrir una línea de préstamos que permitirán a los estudiantes financiar el coste de su matrícula a través del pago fraccionado de su importe total. Se trata de una demanda histórica de los universitarios, sobre todo ante la actual situación financiera y el aumento de las tasas, y que ha tardado casi un año en ponerse en marcha en el seno de la UCO. El acuerdo tiene una vigencia de ocho meses, aunque tanto la institución académica como el BBVA insistieron ayer en asegurar que nace "con vocación de permanencia" y empieza a funcionar hoy mismo. El rector de la UCO, José Manuel Roldán Nogueras, reconoció que no tienen aún ninguna previsión acerca del número de estudiantes que recurrirán a esta nueva modalidad de pago, la segunda que pone en marcha una institución académica en Andalucía, ya que la primera ha sido la de Granada.

Para acceder a esta posibilidad, el alumno sólo tiene que solicitar el abono aplazado de su matrícula a través de la página web de la UCO -www.uco.es-, que a su vez remitirá la información al BBVA. Para facilitar la concesión de los préstamos, la entidad financiera contará con cuatro puestos de trabajo en el Rectorado. En ellos, el alumno tendrá que acreditar el coste de su matrícula, presentar una serie de documentos y el banco le concederá el préstamo, siempre y cuando cumplan las condiciones pactadas, que ayer no se indicaron. No obstante, desde el BBVA indicaron que "el objetivo principal es apoyar el acceso a la educación universitaria a aquellos estudiantes que lo deseen, con independencia de sus recursos económicos". A partir de entonces, el estudiante tendrá que abonar la cuantía a la UCO de manera mensual. El importe mínimo del préstamo que se puede solicitar es de 300 euros y el máximo de 3.500 euros. El tipo de interés es del 0%, mientras que la comisión de apertura del préstamo es del 3,5%. Los alumnos, además, recibirán una tarjeta Blue Joven. Según consta en el convenio suscrito, la línea de préstamo aprobada entre la UCO y el BBVA tiene una dotación de diez millones de euros.

"Hoy es un día de alegría y hemos cumplido un proyecto importante para los estudiantes", consideró Roldán Nogueras, quien también señaló que si el alumno no paga durante dos meses el préstamo, la institución le hará una advertencia de la irregularidad que está comiendo y, si persiste en el impago en el tiempo, finalmente se le bloqueará la matrícula. Es más, las notas del alumno que opte por fraccionar el pago de su matrícula serán provisionales "hasta que pague todo el préstamo", subrayó el rector.

"Sólo somos un instrumento de la ilusión surgida de los alumnos", consideró el director regional para Andalucía y Extremadura de empresas y Corporaciones del BBVA, Luis Llorens, quien añadió que con esta medida desde la entidad financiera "se intenta facilitar el aspecto económico de la educación en un situación difícil para las familias". Consideró, además, que con este préstamo "se dirige el crédito a algo que no es un gasto, sino una inversión". La presidenta del CEU, por su parte, también mostró su satisfacción por el acuerdo y aseguró que constituye "una bocanada de esperanza para muchos alumnos". "Es un verdadero logro y habrá una demanda elevada", auguró.