Telefónica Empresas ha celebrado en Córdoba el foro La transformación digital de la industria agroalimentaria, el primero de una serie de encuentros que realizará de aquí a finales de año en diversas ciudades españolas para hablar de forma realista del futuro digital de la industria local.

Y para ello, ha reunido en la ciudad andaluza a expertos en soluciones tecnológicas de industria 4.0 y de gestión de la industria agrícola europea, como Víctor Montoro, vicepresidente de la Diputación de Córdoba y responsable de Programas Europeos, Javier Arias de Geprom, y Daniel Kumpel de IOVI con directivos de empresas agroalimentarias regionales, como Castillo de Canena, Dcoop, Acesur y Faccsa.

El sector primario aglutina dos sectores, el agrícola y el alimentario, que supone el 10% del PIB, haciendo de España la octava potencia mundial. Su funcionamiento es heterogéneo, ya que incluye desde 1 millón de explotaciones agrarias que dan empleo a más de dos millones de personas, hasta más de 30.000 empresas manufactureras y de conservación, en su mayoría pymes, que generan casi 600.000 puestos de trabajo.

La mayor accesibilidad en los dos últimos años a soluciones tecnológicas disruptivas de inteligencia artificial, conectividad de 5G, blockchain y big data, entre otras, junto al cambio en los hábitos de consumo hacia productos más sostenibles y acordes con una mayor calidad y seguridad alimentaria está suponiendo un gran reto para esta industria.

La principal propuesta es pasar del actual modelo agrícola a uno agro-digital en el que se incorpore la conectividad desde el inicio, en las zonas de cultivo, haciendo posible una trazabilidad de la digitalización del producto a lo largo de todas las fases de su producción y comercialización. Este cambio de paradigma podría reducir costes y optimizar procesos al transformar los datos obtenidos a lo largo de todo el proceso en decisiones ejecutivas que introduzcan mejoras.

Esto es lo que han hecho en la cooperativa agrícola productora de aceite y vinos Dcoop. Ha puesto en marcha una solución que aúna comunicaciones NB-IoT con sensores que monitorizan diversos parámetros, como el clima, el suelo y el cultivo. Unos datos que son recogidos en una plataforma de gestión agroclimática, que junto con imágenes satelitales con los distintos índices de vegetación de los cultivos se procesan y analizan mediante soluciones de inteligencia artificial facilitando a los agricultores tomar decisiones a corto, medio y largo plazo.

Esta asociación que cuenta con casi 1 millón de hectáreas puede así planificar tareas y contratación, reducir el impacto ambiental causado por los agroquímicos y reservar el medio natural, optimizando los recursos hídricos en un 20%.

Los siguientes foros se celebrarán en Bilbao y Madrid, para hablar de la industria manufacturera y el sector logístico, respectivamente.