Sadeco prevé tener controlados los vehículos de su flota con un GPS

Con la finalidad de conseguir una mejor gestión y control de las actividades que realiza, la sociedad municipal de saneamientos, Sadeco, va a instalar en breve sistemas de localización GPS en los vehículos de su flota, según se contempla en un plan de empresa a aplicar entre 2008 y 2011 que debate en su reunión de hoy su consejo de administración. Esta medida, según fuentes sindicales, entre otras, ha provocado que una parte de la plantilla de la empresa esté disconforme, por lo que está previsto que se concentre ante la sede social para mostrar su malestar al órgano de gestión.

La intención de Sadeco es que todos los vehículos dedicados a la recogida y transporte de residuos cuente con un sistema de localización GPS que “ayudará al correcto dimensionado de los circuitos, seguimiento y verificación de las tareas realizadas”, a la par que “potenciará la seguridad de las operaciones y será un elemento clave en la implantación de sistemas de calidad”.

Este “control” sobre la forma de realizar la labor encomendada no ha caído bien en parte de la plantilla, como tampoco lo ha sido la pretensión de incrementar la limpieza viaria en fines de semana y festivos. El plan de empresa califica como “debilidad” del servicio que Sadeco presta el que no se trabaje en estas jornadas, “días de paseo y actividad lúdica en la vía pública y con notable afluencia de visitantes”. Hasta el momento, la única zona de la ciudad en donde se baldeaba en dichas fechas era en el Casco Histórico, en donde se trabajaba todos los días de la semana. Sadeco plantea ahora que este sistema rotatorio se generalice en toda la ciudad, para que “la limpieza en días alternos no se trunque cada fin de semana o festivo”.

Para cubrir este objetivo, el plan de empresa contempla que hacen falta 182 trabajadores de plantilla, por lo que habría que incrementar en 19 los 163 calculados en la actualidad.

Este cambio en los turnos de trabajo se complementa con una optimización de los circuitos de limpieza que se sustenta en un trabajo de campo en el que “se han determinado tramo a tramo del viario las principales características de la vía con influencia sobre la limpieza, tanto físicas como de ocupación y de uso”.

Otro de los puntos contemplados en el plan de empresa que incrementa el control del trabajo que realizan los empleados de Sadeco es el establecimiento de un sistema de control de calidad en el que se sabrá si el empleado ha realizado en su totalidad el cometido que le corresponde. Consistirá en un sistema de ticaje en el que el trabajador deberá “fichar” al inicio, al término y en un punto intermedio. En caso de faltar alguno de estos requisitos deberá justificar la causa por la que no se ha ticado.

Los capataces de las cuadrillas, por su parte, deberán elaborar un parte diario en el que se detallen determinados parámetros para “evaluar tanto el trabajo realizado como la disposición, actitud, etcétera del trabajador”. Éstas son algunas de las circunstancias que afecta más directamente al colectivo laboral y sobre las que ayer no se quiso pronunciar el sindicato CGT, que emplazó toda declaración a la protesta de hoy.

Las reformas contempladas en el funcionamiento de Sadeco alcanzan también a los vehículos. Este documento califica de “exigencia ineludible” que haya vehículos “en cantidad suficiente y con las características específicas adaptadas a cada tipo de recogida y al viario urbano”. También hay un apartado dedicado a la renovación del parque de contenedores, que incluye completar la red de soterrados.