Rodríguez Lainz determina que los huesos se guarden en el juzgado hasta que haya sentencia
El instructor respalda la petición de la defensa y la Fiscalía, frente a las pretensiones de Ruth Ortiz
El juez instructor de la desaparición de Ruth y José, José Luis Rodríguez Lainz, rechazó ayer en un auto judicial que los restos óseos hallados en la finca de Las Quemadillas se entreguen a la familia materna de los menores al ser piezas de convicción. Fuentes judiciales informaron de que el magistrado entiende que los restos óseos, que pertenecen a menores de edades similares a las de los dos hermanos desaparecidos, deben ser custodiados en el juzgado hasta el momento de la vista oral, y ello pese a que no se ha podido extraer ADN de las muestras.
El juez instructor, de esta manera, da la razón a la Fiscalía Provincial de Córdoba y al abogado defensor de José Bretón, José María Sánchez de Puerta, quien ayer recordó que los huesos son "unas pruebas de convicción muy importantes y deben estar disponibles en el momento del juicio". El letrado ha defendido desde el principio que "es imposible" entregar los restos, al tratarse de un "punto base" para su defensa.
La pasada semana, la madre de los menores, Ruth Ortiz, compareció públicamente para reclamar que se le devolvieran los restos y darles sepultura. "Sólo quiero enterrar a mis hijos, yo los parí y tengo derecho a enterrar lo que el desgraciado de su padre ha dejado de ellos", dijo Ortiz. "Que yo sepa, no ha habido ningún proceso por asesinato en el que el cadáver tenga que estar en la vista", apostilló la progenitora, quien aseguró no comprender "el temor que muestran los poderes públicos" a que sus hijos "puedan descansar en paz cuanto antes".
El fiscal jefe, José Antonio Martín-Caro, ya manifestó la semana pasada su contrariedad ante la posibilidad de que las muestras rescatadas en la finca familiar de José Bretón salieran de dependencias judiciales. La Plataforma Justicia para Ruth y José, por otra parte, ha protagonizado varios actos para exigir que los restos se entreguen a la madre.
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