El Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba ha reordenado recientemente la atención de pacientes en la sala de espera de Urgencias de Adultos, un cambio que, según la dirección del centro "ha sido satisfactoriamente aceptado por usuarios y profesionales, ya que permite priorizar y controlar la espera de los pacientes durante todo el proceso de atención en este área asistencial".

El director de la Unidad de Gestión Clínica de Urgencias de Adultos, Luis Jiménez, explicó que "se ha sectorizado la sala de espera del circuito de polivalentes y se ha divido en tres zonas separadas por mamparas". Esto, según señaló, "permite a los profesionales sanitarios controlar la situación de los pacientes en cada una de las fases del proceso y mejorar ostensiblemente su grado de intimidad y confort. Estas mejoras repercuten de manera positiva en la percepción de la atención que reciben los usuarios". Además, "desde el control se puede ver al instante cuántos pacientes se encuentran en cada fase del proceso".

A esta variación se suma la creación de la figura de coordinadora de sala, cuyas funciones principales son informar periódicamente y a demanda, tanto a familiares, como a pacientes, de el estado de éstos últimos y de la fase del proceso en que se encuentran. Esta profesional se ubica en un espacio central habilitado a modo de control, tiene acceso a la historia del enfermo y su posición estratégica le permite controlar en cada momento la situación de la sala.

En concreto, según indicó el doctor Jiménez, que también es director del Plan Andaluz de Urgencias y Emergencias de Andalucía, la sala de espera de pacientes se estructura desde hace unas semanas en tres espacios. En el primero, la llamada zona P, están los pacientes ya clasificados y pendientes de ser atendidos por un médico. En el segundo -zona E-, se ubican los pacientes que ya han sido atendidos y se encuentran pendientes de evolución, diferenciando los que precisan silla de ruedas, de los que necesitan camilla durante la atención de su proceso urgente. Finalmente, en la zona R, están los pacientes a los que ya se les ha completado su asistencia urgente y están pendientes de ingresar o de irse de alta a su domicilio en ambulancia.

Esta nueva reordenación de la sala de espera de Urgencias, que fue visitada por la delegada de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta en Córdoba, María Ángeles Luna, y por la gerente del hospital, Valle García, es una de las medidas que se han puesto en marcha tras la constitución del grupo de mejora del Proceso de Atención en la Unidad de Gestión Clínica de Urgencias, integrado por profesionales de todos los estamentos y del equipo de gobernanza de la unidad.

El periodo de espera del paciente mientras es atendido en Urgencias puede influir en su estado de ánimo y en la percepción de la duración de esta atención. El aumento de la frecuentación en los servicios de urgencias hospitalarios en los últimos años, con una mayor complejidad en los procesos y una población cada vez más envejecida, se ha convertido en objeto de preocupación tanto para los profesionales como para la población.