Policías denuncian que la Comisaría lleva meses sin aire acondicionado

La mala situación de las dependencias policiales ubicadas en la avenida Campo Madre de Dios, un antiguo cuartel de la Policía Armada, son un secreto a voces. En los últimos meses, varios sindicatos han reiterado la necesidad de acometer una reforma integral del edificio, y ayer fue la Unión Federal de Policía (UFP) el colectivo que llamó la atención sobre la situación de estas dependencias. La crítica se centró en el sistema de refrigeración del inmueble, pues el aire acondicionado no funciona en determinadas dependencias desde el pasado mes de mayo, tal y como aseguró el delegado de la UFP, Juan Cruz.

Los vestuarios, las oficinas de determinados grupos y las dependencias destinadas a las centrales sindicales son algunos de los espacios afectados por la avería del aire acondicionado y donde el termómetro ha superado los 30 grados centígrados algunos días de verano. Cruz calificó de "obsoleto" el sistema de refrigeración y recordó que el comisario accidental, Pedro Jiménez Barea, les ha informado de que "no hay dinero para arreglarlo". La antigüedad de la instalación eléctrica, por otra parte, impide que se conecten nuevos aparatos de refrigeración, por lo que algunos agentes han recurrido a la compra de ventiladores para afrontar los días más cálidos del verano.

La Confederación Española de Policía (CEP) ya anunció a finales de junio su intención de presentar una denuncia ante la Inspección de Trabajo debido a los fallos continuos que registra la refrigeración de la Comisaría de Campo Madre de Dios. "La excusa de la crisis no puede ser la causante de la inacción de los garantes de la salud de los policías", criticó en su momento el delegado de la CEP, Fernando Ramón Calderón, quien subrayó las "condiciones lamentables" en las que los uniformados están abocados a trabajar en verano.

Pero desde el pasado 24 de junio -cuando se difundió la crítica- nada ha mejorado en el inmueble. El excomisario, José Antonio de la Rosa, reconoció en marzo de 2010 la mala situación de las dependencias durante la presentación de la estadística anual sobre criminalidad, una crítica que realizó en presencia del subdelegado del Gobierno, Jesús María Ruiz. De la Rosa destacó que la Comisaría se encuentra en una situación "obsoleta" y manifestó que existen "carencias que hay que resolver". También el Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, censuró en un informe especial el mal estado de los calabozos, de los que dijo que "son unas instalaciones claramente mejorables". El inmueble se encuentra pendiente de una remodelación integral a cargo del Ministerio del Interior.