La Policía Local detiene a dos menores por la quema de varios contenedores

Agentes de la Policía Local han detenido a dos menores de 11 y 14 años por la quema de contenedores en la zona de Las Moreras. El teniente de alcalde de Seguridad, Emilio Aumente, explicó ayer que la patrulla hizo una batida por la zona después de otro incidente y localizaron a los dos jóvenes. Se trata de menores reincidentes, según añadió Aumente. Los arrestados han pasado a disposición de la Fiscalía de Menores, que es quien ahora tiene que decidir. La Policía dio aviso a sus padres y en presencia de ellos reconocieron "ser los autores de los hechos". Los progenitores fueron informados de que se iba a dar cuenta a la Fiscalía de Menores de los hechos en los que estaban implicados sus hijos.

La Policía llevaba tiempo detrás de estos sucesos porque, según apuntó el responsable de Seguridad, cuando los bomberos actúan en la extinción de una candela callejera en esta zona, "algunas personas, como represalia, queman contenedores". Aumente reconoció que en estas fechas se incrementa el número de daños en este tipo de mobiliario urbano, aunque la cifra anual se suele mantener estable en los últimos ejercicios. Los datos facilitados por la Policía Local reflejan que durante 2013 los agentes actuaron e 263 casos de quema de contenedores, mientras que en 2014 fueron 208. Las intervenciones policiales ascendieron a 266 en 2015 mientras que el año pasado fueron 206. En lo que va de 2017, y hasta el 14 de diciembre, se han contabilizado 260 actuaciones.

En las últimas semanas, un joven de 19 años y estos dos menores han asumido ante agentes de la Policía Local y sus familiares haber quemado recipientes de residuos en la vía pública.

La madrugada del martes 19 de diciembre, a las 05:30 en la avenida Virgen del Mar, se detuvo por quemar papeles junto a un contenedor de basura al citado joven, reincidente por hechos similares, pues en la detención anterior, el pasado 7 de diciembre, reconoció ser autor del incendio que calcinó un recipiente de residuos en la plaza de la Juventud, ubicada también el barrio de la Fuensanta. Las circunstancias justificaron que el detenido fuese trasladado a un centro sanitario para valorar su salud mental.

Aumente aseguró que este asunto requiere más de "educación" que sanciones ya que hay que sensibilizar a la población de que el vandalismo de este tipo cuesta dinero a las arcas municipales.