Pimentel defiende su inocencia porque las ayudas eran "legales"

El ex ministro de Trabajo y Seguridad Social Manuel Pimentel (PP) defendió ayer su inocencia y la de los trabajadores de la empresa cordobesa Taller de Libros cuya imputación en el caso de los ERE ha solicitado la Fiscalía Anticorrupción, al poner de manifiesto que las ayudas solicitadas por los trabajadores eran "legales", por lo que confió en que la petición de que sean imputados no prospere y que la juez de los ERE acabe sobreseyendo las actuaciones.

Manuel Pimentel explicó a este periódico que ha recibido "con mucha sorpresa" el escrito de la Fiscalía Anticorrupción solicitando su imputación y la de varios trabajadores de Taller de Libros. "En ningún caso ni yo ni los trabajadores podíamos suponer que de lo que ocurrió pudiera deducirse nada delictivo", aseveró el ex titular de Trabajo, que recordó que tanto él como los trabajadores fueron citados a declarar en calidad de "testigos" por la Guardia Civil. "Es muy raro que ahora de repente se solicite la imputación, cuando no tenemos nada que ocultar y no sabemos muy bien por qué" se pide la imputación, destacó el ex ministro.

Pimentel añadó que los agentes de la Guardia Civil "no vieron ninguna participación" en los hechos por su parte y de los empleados. "Y hablo en mi nombre, en el de la empresa y de los trabajadores, que están imputados por una ayuda que se solicitó legalmente".

El ex ministro señaló que la empresa tenía dificultades y los trabajadores, que son "personas honradas por las cuales pongo el brazo, se enteraron que había unas ayudas de la Junta de Andalucía, una ayudas legales y publicadas, y decidieron solicitarlas, lo cual vi muy bien". La ayuda se les concedió, se ingresó "legalmente" en la cuenta de los trabajadores y "ése es todo el tema, no hubo ni comisiones ni intermediarios, nada", insistió el empresario.

Manuel Pimentel explicó asimismo que, en su condición de presidente consejo de administración de Taller de Libros y porque así se lo pidieron los trabajadores, acudió a "una reunión con la Junta, en la cual se explicaron los motivos por los cuales la empresa estaba en crisis". "Ni yo he solicitado la ayuda ni la empresa la ha percibido, estoy seguro de que lo piden los trabajadores de forma legal", dijo.

El ex ministro espera que no prospere la petición de imputación de la Fiscalía y que esta parte de la investigación se sobresea, porque está "completamente convencido" de su inocencia y de la de los trabajadores.