El Parque Cruz Conde empieza a ver la luz tras 20 años de protestas

Tras décadas de continuas críticas por ver cómo pasaban las corporaciones municipales una tras otra sin que en ninguna se moviera ficha en el Parque Cruz Conde, los vecinos de esta zona de la ciudad puede celebrar que la remodelación de su espacio verde, su principal objetivo, encara ya la recta final. Aunque ya pueden verse parte de los resultados de esta actuación, la mayor parte de la zona verde se encuentra aún rodeada de vallas metálicas que demarcan la zona en la que se está ejecutando la obra. Aunque el plazo fijado por el Ayuntamiento apuntaba a marzo como la fecha de finalización del proyecto, desde el colectivo vecinal señalan que será "a lo largo de la primavera, antes del verano en cualquier caso", cuando la esperada reforma sea una realidad. Se sienten en cierto modo "afortunados" en una ciudad en la que son mayoría los que se quejan de promesas incumplidas, proyectos guardados en el cajón y obras incompletas.

Las alrededor de 300 nuevas luminarias, la instalación de un nuevo sistema de riego por goteo, más ecológico y eficaz, y la mejora de los espacios verdes en general son los ejes que vertebran una intervención que ha necesitado un gasto de 1,7 millones de euros. La única queja que tienen, si acaso, en el colectivo que representa al Parque Cruz Conde es que el Ayuntamiento ha tenido que esperar la llegada de fondos del Gobierno central para poder ejecutar la mayor reforma en la historia de una de las zonas verdes de mayor tamaño que hay en la ciudad. "Todo se ha conseguido a base de mucho pedir y hacerlo una y otra vez casi sin descanso", recalca el presidente de la Asociación Parque Cruz Conde, Carlos Ordóñez, al analizar los pasos seguidos en todos estos años de atrás para que el proyecto pudiera ver al fin la luz.

Al margen del arreglo del parque, en esta zona de la ciudad -la parte más meridional del Distrito de Poniente Sur-, también se han ejecutado en los últimos años la remodelación de las calles José Altolaguirre y José María Pemán, aparte del traslado del mercadillo de venta ambulante. Sobre este último espacio, los vecinos agradecieron el traslado, si bien recordaron que éste se produjo con cierto retraso respecto a los plazos que les dieron en su día desde el Ayuntamiento.