Las palabras del subdelegado del Gobierno en Córdoba, Juan José Primo Jurado, con las que confirmaba la posibilidad de que el asesino de las niñas de Alcàsser, Miguel Ricart, se estableciera en Córdoba, no sólo han generado alarma social entre la ciudadanía, también han provocado el fuerte enfado del alcalde de la ciudad, José Antonio Nieto. El regidor no dudó ayer en aprovechar sus actos públicos para desautorizar al representante del Ejecutivo central en la provincia e insistir en que por el momento no le consta "en absoluto y por ninguna vía", excepto por rumores y campañas en las redes sociales, que Ricart vaya a venir a la ciudad. "Es un poco ridículo opinar cuando no hay ninguna noticia cierta y veraz que le permita opinar sobre ese aspecto", insistió.

Las declaraciones de Primo Jurado han sido, según Nieto, "desafortunadas", lo que provocó que él mismo tuviese que desacreditar lo que tan sólo 24 horas antes confirmaba uno de los miembros de su propio partido. "Yo que soy el alcalde y normalmente tengo al alcance a información mucho mayor y cierta que la mayoría de los ciudadanos, no me consta en absoluto que esa posibilidad exista y que haya ningún tipo de decisión que permita suponer o decir que este señor pueda estar o acabar en Córdoba", dijo con rotundidad, mostrando su malestar ante el gran revuelo creado. El alcalde lanzó así a la ciudadanía un mensaje de "tranquilidad", ya que, según recalcó, "no hay ni una sola información cierta, veraz o sólida que lleve a opinar sobre un tema delicado, complejo y que provoca tensión en la sociedad". En este sentido, señaló que no le consta que "exista ningún tipo de vinculación o arraigo de esta persona con Córdoba", de modo que "es algo que no deja de ser una especulación". "Ni a nivel local, ni regional, ni nacional a día de hoy hay nadie que pueda confirmar o desmentir una información que ha sido fruto de una serie de opiniones que se han dado y es un rumor que ha ido creciendo y probablemente se ha alimentado con afirmaciones que no han sido excesivamente afortunadas", al tiempo que apeló a "la responsabilidad de todos y la necesaria tranquilidad en la ciudad".

Ante la posibilidad de que finalmente Miguel Ricart se estableciese en Córdoba, extremo que fuentes de la Policía Nacional aseguraron a El Día que no ha sucedido por el momento, Nieto dijo que se actuaría con la mayor diligencia "para evitar cualquier tipo de riesgo y que la intranquilidad se transforme en alguna otra cosa que no es buena para nadie".

El alcalde no fue el único que tuvo que hacer frente a las repercusiones de las declaraciones del subdelegado. En instancias superiores, la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, durante un acto en la localidad gaditana de San Fernando recalcó que "va a estar muy al tanto" de las consecuencias de la doctrina Parot en Andalucía, en referencia a la posibilidad de que Miguel Ricart se desplace a Córdoba o que el Loco del chándal lo haga a Almadén de la Plata (Sevilla), y llamó a la tranquilidad de los andaluces porque "los Cuerpos y Fuerzas de seguridad del Estado van a estar al tanto de sus circunstancias y de que se garantice la seguridad".

Crespo reconoció que "desde luego a nadie nos gusta lo que ha ocurrido con el tema de la doctrina Parot", aunque defendió que los ciudadanos "tienen que estar tranquilos". "Vamos a trabajar por la seguridad y la convivencia en paz de todos los andaluces", dijo la delegada, al tiempo que aseguró que "por supuesto vamos a estar muy al tanto de lo que ocurra con respecto a las personas que puedan estar en Andalucía".

La delegada, incluso, fue más allá al insistir que la obligación de la Delegación del Gobierno en Andalucía y, por ende, de la Subdelegación en Córdoba, "es darle tranquilidad a los ciudadanos" y que, en ese sentido, los ciudadanos "tienen que estar tranquilos porque afortunadamente tenemos unos cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado que trabajan de forma coherente y preventiva en toda Andalucía".

La Orden Franciscana y la Orden Trinitaria en Córdoba también han sufrido las consecuencias de las palabras de Primo Jurado, teniendo que hacer uso de los medios de comunicación para desmentir que le vayan a dar cobijo al único condenado por el asesinato de las niñas de Alcàsser, un crimen que conmocionó a la población española en la década de los 90. En redes sociales como Twitter o Facebook son miles los mensajes que avisan de la posibilidad de que Miguel Ricart, que salió en libertad el pasado viernes de la prisión de Herrera de la Mancha (Ciudad Real), tiene pensado desplazarse a la capital cordobesa.

Miguel Ricart fue condenado en 1997 a 170 años de prisión por secuestro, violación y asesinato de las adolescentes Miriam García, Toñi Hernández y Desirée González en noviembre de 1992. Debió ser excarcelado en 2011 pero un año antes se le aplicó la doctrina Parot. Sus beneficios penitenciarios se computaron entonces sobre el total de la condena y se fijó su nueva fecha de salida en 2023. Pero el varapalo del Tribunal Europeo de Derechos Humanos aceleró su libertad. El Rubio ha permanecido algo más de 20 años en prisión mientras sigue desaparecido el otro acusado del triple crimen, Antonio Anglés.