Llegó, aunque algo tarde. Por fin las calles de la ciudad, principalmente las de los centros comerciales abiertos, brillan ya con las tradicionales luces de Navidad cuyo encendido efectuó ayer la alcaldesa, Isabel Ambrosio, tras recibir algunas críticas por parte de quienes consideran el puente una fecha algo tardía para la cita (y después de que todas las capitales andaluzas lleven ya varios días con las bombillas encendidas). Santa Rosa fue el barrio elegido para apretar el botón y prender así la luz que por estas fechas siempre iluminan las calles, que ayer, por ser un día previo a un puente, estaban a rebosar. Los vecinos arroparon así a gran parte de la corporación municipal que se desplazó hasta Valdeolleros para ver el arranque de este alumbrado que este año tiene además un tinte social, ya que el botón de encendido llevaba el logo del programa de donación de órganos que promueve el Hospital Universitario Reina Sofía. Según apuntó la alcaldesa, con este gesto se pretende rendir homenaje a los casi 1.000 donantes que durante estos años han salvado tantas vidas. "La solidaridad y la generosidad son dos características que conforman la personalidad de los cordobeses y queremos, con este símbolo, recordar la importancia de seguir regalando vida a través de la donación de órganos", apuntó Ambrosio, que se acompañó además de la directora-gerente del centro hospitalario, Valle García.

Con ese botón se iluminaron así medio centenar de calles en toda la ciudad, además de las barriadas periféricas. Algunas de las vías que cuentan este año con alumbrado por primera vez son Almogávares (donde también se ha instalado el Belén de luces) y la calle La Higuera, ambas en Santa Rosa, ya que el Ayuntamiento continúa con su política de ir rotando el encendido del alumbrado por los distintos centros comerciales de la ciudad, al igual que el año pasado ocurrió con Ciudad Jardín y el anterior con La Viñuela. De esta forma, según dijo la alcaldesa, "este equipo de gobierno pone de manifiesto su apuesta por los barrios de una ciudad como Córdoba, que no se reconocería sin ellos, al tiempo de su decidida voluntad de fomentar el comercio de cercanía, fundamental para la economía de muchas familias de esta ciudad y para humanizar el día a día de la misma".

Más de 1,4 millones de puntos de luz son los que componen este año este alumbrado, que se encenderá todos los días hasta el próximo 6 de enero, y que ha costado casi 300.000 euros, más 3.400 para soportar el gasto energético. Y no solo las luces componen los adornos navideños que este año el Consistorio ha instalado por toda la ciudad (repartidos en árboles, letreros y arcos) ya que muchas plazas también cuentan con flores de Pascua y con algunos motivos realizados en los centros cívicos con la colaboración de la Delegación de Participación Ciudadana y Sadeco.

Con el ambiente festivo llenando la ciudad, el delegado de Presidencia, Emilio Aumente, inauguró junto al presidente de la Agrupación de Hermandades y Cofradías, Francisco Gómez Sanmiguel, el Belén Municipal que este año se puede visitar en el propio Ayuntamiento, tras las obras que se han sucedido a lo largo de estos meses en el edificio capitular. Aumente, también rodeado de otra parte de la corporación municipal, instó a los cordobeses a visitar este Nacimiento y también "a montar el Belén en vuestras casas", al tiempo que pidió, en tono de risa, que se dejara de lado a Papá Noel. En este caso, el Misterio lo han montado integrantes de la Agrupación de Cofradías. El alumbrado llega también hasta la puerta del Ayuntamiento, donde se han colocado varios letreros, y a la calle Capitulares, que este año luce aún más tras su peatonalización.

Este pistoletazo de salida también se desplazó hasta el Bulevar de Gran Capitán, donde Comercio Córdoba ha instalado el Faro de la Navidad, un tobogán gigante que da luz a todos los cacharritos de esta céntrica vía y que es uno de los principales atractivos de las fechas dada la historia que tiene: ha viajado por Shanghai, Hong Kong, Dubai y diferentes ciudades del centro de Europa y se construyó a principios del siglo pasado. El mensaje que se quiere hacer llegar con esta atracción, según explicaron desde Centro Córdoba, es el de iluminar a la ciudad y a la provincia. A este Faro de la Navidad se le unen además todas las atracciones que año tras año hacen las delicias de los más pequeños, como el Yeti cuentacuentos, el Polar Exprés o un tren mecánico tirado por varios renos.

Y la celebración se extendió también hasta la sede de la Diputación, el Palacio de la Merced, donde el presidente de la Asociación de Claveles y Gitanillas, Rafael Barón, pronunció el pregón Ciudad de Córdoba en el que apostó por mantener las tradiciones que, de toda la vida, están relacionadas con la Navidad. En este caso, la institución provincial eligió a Barón para dar el pregón por la estrecha relación que existe entre la asociación que preside y la Diputación, además de resaltar la importancia que tienen los patios en la ciudad en cualquier época del año.

Con un macropuente por delante, cordobeses y turistas tendrán la oportunidad de disfrutar de este alumbrado, que un año más corre a cargo de la empresa de Puente Genil Iluminaciones Ximénez, líder en el sector y que viste de luz por Navidad a capitales de todo el mundo.

El ambiente, eso sí, no lo aportan únicamente las luces, ya que varios coros también amenizan estas fechas, así como el olor de las castañas o el mercado instalado en la plaza de las Tendillas, que se retirará para la fiesta de Fin de Año. Además también se han inaugurado varios belenes, tanto institucionales como de asociaciones, por los que hacer una ruta acompañada de anís y mantecados.