Es una técnica para salvar vidas que es útil en muchas situaciones de emergencias, como un ataque cardíaco o cuando una persona se está ahogando. La Reanimación Cardiopulmonar (RCP) salva vidas y su aprendizaje y práctica se han llevado a cabo este lunes en el instituto La Fuensanta, dentro de las terceras Jornadas de Reanimación Cardiopulmonar. En la jornada han participado un millar de estudiantes.

Desde el centro han explicado a el Día que la iniciativa surgió hace tres años "cuando una alumna de un ciclo de Sanitaria salvó la vida a un adolescente que entró en parada en la plaza de la Corredera. Ella consiguió mantener su corazón latiendo hasta que llegaron los equipos de emergencia". Es más, esta estudiante "había aprendido a realizar la maniobra de RCP en el centro", han recordado.

Es por ello, que el Departamento Profesional de Sanidad del instituto planteó a la dirección "la necesidad de que todo el alumnado, no solo el que incluía dichas prácticas como parte de su enseñanza, así como todo el profesorado y personal laboral del instituto tuvieran la oportunidad de aprender a reanimar".

La actividad se encuentra enmarcada en la materia de varios ciclos de Formación Profesional de Sanidad y ha contado con la presencia de profesionales del 061 que se han desplazado al centro con torsos de reanimación. Ellos se han encargado de enseñar a todo el centro, junto con el alumnado de segundo curso de Emergencias Sanitarias del instituto la reanimación cardiopulmonar siguiendo los protocolos vigentes de covid-19". 

Una iniciativa que, además, ha brindado la oportunidad de revisar si el antiguo alumnado que sigue cursando enseñanzas en el centro recuerda y practica las maniobras de forma eficiente.

A todos los técnicos y al alumnado instructor del propio instituto se les ha dado como detalle un lapicero de madera, realizado por el alumnado de Formación Profesional Básica Específica de Carpintería, coordinados por el profesor Antonio Suárez.