La Junta reduce a un año el concierto de los tres colegios con alumnos de un solo sexo

La Consejería de Educación sólo ha renovado por un año -y no por cuatro como se hace desde hace 16 años- el concierto de los colegios Zalima, en la capital, Yucatal en Posadas, y Torrealba, en Almodóvar del Río, por acoger a alumnos de un solo sexo. A pesar de que la citada orden aún no está publicada en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), la delegada de Educación, Antonia Reyes, fue tajante y aseguró ayer que "los centros que soliciten un concierto tienen que cumplir la normativa".

A partir del próximo curso, ser un colegio mixto es el nuevo requisito para suscribir conciertos. La nueva instrucción se basa en la Ley Orgánica de Educación (LOE), que por primera vez obliga a la no discriminación por razón de sexo. "En ningún caso habrá discriminación por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social", sostiene el artículo 84.3 de la normativa.

La respuesta de los centros no se hizo esperar y ayer mismo anunciaron que han decidido presentar, en primer lugar, una alegación a la citada orden y, según el resultado, "se impugnará ante los tribunales", apuntaron desde la Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE-Córdoba). Las mismas fuentes consideraron que con la citada orden "se están lesionado los derechos de estos centros, que no son sexistas, ya que contemplan la posibilidad de ambos sexos" e incidieron en que a estos colegios "han llegado solicitudes de ambos sexos". Apuntaron que la argumentación utilizada por la Administración autonómica para reducir la validez del convenio a un año es que "el titular ha incumplido las normas de escolarización porque sólo ha admitido a alumnos de un sexo" y añadieron que "no ha habido denuncias" por parte de las familias durante el proceso y que "en los últimos 16 años, la Junta jamás ha dicho nada".

Concepción Gallardo es la directora del colegio Yucatal, que ofrece Bachillerato y diversos ciclos de grado medio y superior y, cuenta, además con una residencia femenina, y aseguró que a su centro "viene algunos niños". Incidió en que la norma "vulnera los derechos" y aseguró que cuentan con informes favorables de los servicios de inspección. Gallardo destacó la importancia del centro, que este curso ha contado con 180 alumnos, ya que "lleva 40 años atendiendo a la población rural y a gente que no puede costear la educación".

La dirección del colegio Zalima también mostró su disconformidad con la orden, que provocará, si no hay modificaciones, que a partir del curso 2010-2011 sus enseñanzas sean privadas. No obstante, dejó claro que a pesar de la decisión de la Junta "está garantizado el mantenimiento del concierto para el alumno matriculado en primero de Bachillerato para el próximo curso y para el segundo de 2010-2011, además de las alumnas que se matriculen este curso en primero de los ciclos formativos". Consideraron que la decisión "unilateral" de la Administración educativa "llega a Zalima por sorpresa, después de llevar a cabo un proceso de escolarización impecable, reconocido por la propia inspección educativa con informes favorables, ni denuncia alguna que pudieran poner en duda el cumplimiento de la normativa". La dirección de este colegio, que este año ha contado con unas 300 alumnas, incidió en que "no sería lógico cambiar ahora de identidad propia", después de funcionar "en esta línea durante 45 años".

Este diario intentó sin éxito ponerse en contacto con la dirección del colegio Torrealba, en el que este curso han recibido clases unos 200 alumnos en Bachillerato y sus ciclos formativos de grado medio y superior, para conocer su opinión acerca de la orden de Educación.