Subvenciones

La Junta concede más de 840.000 euros en ayudas al alquiler de viviendas en Córdoba

  • Familias con problemas socioeconómicos y entidades del tercer sector se han beneficiado de las subvenciones

Cristina Casanueva, Antonio Herrera y Antonio Repullo.

Cristina Casanueva, Antonio Herrera y Antonio Repullo. / El Día

La Junta de Andalucía ha concedido más de 840.000 euros en ayudas al pago del alquiler de viviendas en Córdoba a familias vulnerables y también a entidades públicas y colectivos del tercer sector. Es el anuncio que ha hecho el delegado del Gobierno del Ejecutivo autonómico en Córdoba, Antonio Repullo, quien ha señalado que las ayudas concedidas forman parte de "uno de los programas más ambiciosos de la Consejería de Fomento" y que han servido para beneficiar a a 259 familias.

En concreto, se trata del Plan Vive Andalucía, que incluye una línea de ayudas para el pago del alquiler a familias con problemas de carácter económico y para las citadas entidades del tercer sector.

La convocatoria cuenta con dos líneas de ayudas. La primera atiende directamente al pago del alquiler de la vivienda habitual, en la que se abonan 12 meses consecutivos completos. En Córdoba se han concedido 137 solicitudes por un importe superior a los 431.115 euros. La segunda línea va dirigida a administraciones, empresas públicas y entidades sin ánimo de lucro que facilitan una solución habitacional a estos colectivos de especial protección y está dotada con 411.400 euros para 122 viviendas beneficiadas. Entre los beneficiarios se encuentran seis entidades privadas cordobesas, como la Fundación Don Bosco, y Vimcorsa.

A la presentación de estos resultados, que ha tenido lugar en la sede de la Fundación Dos Bosco, también ha acudido la delegada de Fomento, Cristina Casanueva, quien ha explicado que estas ayudas nacen para "echar una mano a las familias que lo necesitan y minimizar los efectos de la pandemia". Se trata, ha continuado, "de ayudas directas para las familias en situación de vulnerabilidad".

Casanueva ha reconocido que dada la crisis sanitaria y sus efectos socioeconómicos, la concesión de estas subvenciones "tenían que ser muy rápidas y telemáticas y, en menos de dos meses desde la solicitud se han resuelto y pagado". 

Los destinatarios para acceder a las ayudas para el alquiler tenían que cumplir una serie de requisitos, como no tener ninguna vivienda en propiedad y ser titular de un contrato de arrendamiento. Las ayudas son de un máximo de 500 euros mensuales, más 200 euros para gastos de comunidad, agua y luz. El máximo que se ha concedido al año ha sido de 6.000 euros.

La delegada ha explicado que en Córdoba se han beneficiado dos entidades públicas como la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía y Vimcorsa, con 89 viviendas; y ocho entidades privadas, fundaciones y ongs, de ellas, cinco en la capital. Casanueva se ha referido a la Fundación Don Bosco "que lleva ayudando desde hace 22 años a las familias en situaciones de vulnerabilidad, realizando una gran labor de fomento de la empleabilidad y desarrollando itinerarios de inserción sociolaboral flexibles y adaptados que mejoren el entorno para jóvenes y mujeres".

En la capital, por su parte, han resultado beneficiarias la Comunidad Adoratrices de Córdoba, dos viviendas, Fundación Rais-Red apoyo interg.socio-laboral, con siete viviendas, la Asociación mujeres en zona de conflicto, con otras siete y Aperfosa, con una vivienda.

Mientras, en la provincia han resultado beneficiarias la Asociación Ben rehabilitación aliento vida de Puente Genil, con una vivienda, la Asociación ayuda al inmigrante acoge de Lucena), también con una y la Asociación Baena solidaria, con 3 viviendas.

También la Fundación Don Bosco y su director, Antonio Herrera, ha explicado que han recibido 72.000 euros para el pago del alquiler de los cuatro pisos que tienen en Córdoba y donde atienden a 19 chicos procedentes de protección de menores. Se trata, ha indicado, de chicos extutelados que se quedan en una situación de vulnerabilidad". 

Desde la Fundación Dos Bosco se les prepara para "su vida autónoma nivel formativo, a nivel personal y laboral para que en dos años puedan emanciparse con cierta garantía y seguir una vida lo más normalizada posible". 

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