Jícar se implanta en Guinea para el desarrollo de infraestructuras

La empresa ya ha desplazado un ingeniero a Bata -la segunda ciudad más importante del país- y ha iniciado contactos para participar en varios proyectos.

Córdoba/La salida el exterior es una de las principales herramientas con que cuentan las empresas para afrontar esta crisis. La búsqueda de nuevos mercados, más allá de las maltrechas economías europeas, es clave para seguir creciendo o, incluso, mantenerse, sobre todo en sectores muy golpeados por la actual coyuntura como es el caso de la construcción. Así lo han considerado los directivos de la empresa de construcción Jícar -con María Dolores Jiménez al frente- que ha iniciado un proyecto para implantarse en Guinea Ecuatorial. Con Europa en continua crisis y con gran parte del terreno copado en las denominadas economías emergentes -como Brasil o China- hay que optar por nuevas oportunidades. "Lo primero que nos atrajo es el idioma, porque Guinea fue colonia española y hay menos barreras, además de los motivos económicos, ya que Guinea tiene pendiente el desarrollo de muchas infraestructuras como puentes o un aeropuerto", aseguró el director de Internacionalización de Jícar, Vicente Ariño.

Después de un primer estudio de mercado, la empresa comenzó los planes de expansión con un primer viaje en septiembre. Desde entonces trabaja allí un ingeniero que está colaborando con una firma local en una obra. "Queríamos empezar a trabajar allí y establecer contactos antes de implantar nuestra empresa allí definitivamente", aseguró Ariño. Después de este tiempo, y tras salvar los trámites administrativos que todavía quedan, la intención es abrir la empresa propia bajo el nombre Jícar Guinea Eucatorial, concretamente en la ciudad de Bata, la segunda más importantes después de la capital, Malabo. Las previsiones son que dentro de aproximadamente dos meses pueda estar funcionando.

Ariño explicó que Guinea cuenta con el 6% de las reservas de petróleo de todo el mundo y que está en pleno desarrolla y necesita dotarse de infraestructuras. "Ahora están licitando un aeropuerto en Malabo y tienen previsto construir un puente de tres kilómetros, se trata de intervenir en la construcción de este tipo de infraestructuras", aseguró Ariño. Jícar ya ha tenido contactos con el gobierno guineano y "nuestra idea es colaborar en este tipo de obras, también en energía eléctrica o edificación", añadió. Hasta el momento, la mayoría de las empresas que están implantadas en Guinea son de China, Líbano, Marruecos o Serbia. "Españolas prácticamente no hay, porque ponen muchos impedimentos burocráticos", aseguró.

Jícar va a realizar una inversión inicial de unos 300.000 euros sólo para empezar a trabajar. Esta cantidad irá aumentando en la medida en que le vayan adjudicando obras. La intención de la empresa es que un plazo de dos años se haya conseguido el retorno de la inversión. Ariño aseguró que el futuro de las empresas, sobre todo las de la construcción, es salir al exterior; de lo contrario, en un plazo de dos años "habrán desparecido todas". El responsable de la Internacionalización de Jícar no descarta iniciar otros proyectos en otros países con economías emergentes que supongan un impulso para las empresas y para su supervivencia.

Jícar es una empresa de construcción al frente de la cual está María Dolores Jiménez, muy conocida en el ámbito económico de la provincia, entre otros motivos, por haber estado al frente de la Cámara de Comercio. Jiménez además está inmersa en otros proyectos como la comercialización del primer vino espumoso elaborado a base de naranja, Burnarj, producto del que también ha iniciado su exportación en varios países europeos como Holanda o Francia.

stats