Hostecor denuncia el auge de plazas hoteleras ilegales

El sector afirma que sólo en la capital hay alrededor de 3.000 camas en viviendas y apartamentos turísticos sin declarar y asegura que la situación es "insostenible"

Antonio Álvarez, Antonio Palacios, Rafael Fernández Chinchilla y Antonio Medina.
A. Calero

17 de diciembre 2011 - 01:00

La Asociación de la Hostelería cordobesa (Hostecor), denunció ayer el auge y la proliferación de alojamientos turísticos "ilegales" que suponen una competencia desleal y está provocando graves pérdidas al sector. El secretario general de Hostecor, Antonio Álvarez, detalló que, según sus investigaciones, sólo en la provincia hay alrededor de 3.000 plazas de alojamiento al margen de la ley y que se corresponden tanto con habitaciones de casas particulares como auténticos negocios paralelos que se publicitan en la red y funcionan como hostales o apartamentos turísticos sin cumplir la normativa que se exigen para este tipo de negocio. Según Álvarez, "casi el 50% de los establecimientos" disponibles en Córdoba capital "son ilegales" y esta práctica también se está extendiendo por la provincia sobre todo en las casas rurales. La realidad es que la Ley del Turismo incluye la figura de la "vivienda turística vacacional", creada para regular el alquiler de pisos sobre todo en la costa por parte de particulares. Sin embargo, esto ha derivado, según Hostecor, en un "vacío legal" que permite que cualquiera pueda ejercer la actividad de hostelería con muchos menos requisitos que los negocios que sí están dados de alta. De hecho, el objetivo del colectivo, como se ha marcado en la Mesa del Turismo, es que se elimine ese apartado de la normativa para evitar más especulaciones.

Lo curioso es que esta realidad no se hace de manera oculta sino que la publicidad es similar a la de los hoteles o alojamientos homologados. En Córdoba se concentran sobre todo en el Casco Histórico y se pueden ver en páginas web como Homelidays, Hospedaje, Hostelworld, Infohostal o Mercatour, entre otras. De hecho, el usuario no distingue a la hora de reservar un alojamiento si éste es ilegal o no. En este sentido, desde Hostecor pidieron la implicación de "todas las administraciones" para atajar el problemas. Desde la Junta de Andalucía -para modificar la Ley del Turismo- hasta Urbanismo que es quien otorga los permisos según el uso que se dé al inmueble y la Subdelegación, que es a quien compete la seguridad. Los hosteleros también pidieron la implicación de las asociaciones de consumidores que, por ahora, "brilla por su ausencia", ya que este tipo de alojamientos no presenta todas las garantías que debería si el negocio fuera declarado.

La crisis de la construcción, que ha dejado muchos inmuebles vacíos, es una de las causas que ha provocado la proliferación de este tipo de alojamientos. Además cada vez es más frecuente el perfil del turista mochilero que prefiere establecimientos low cost y, en este sentido, los precios son muchos más bajos porque, evidentemente, no tienen tantas trabas fiscales como los legales. Álvarez aseguró que estas prácticas se desarrollan en la economía sumergida y que además, propician puestos de trabajo fraudulentos en los que los empleados no están ni dados de alta en la Seguridad Social. Con estas condiciones, la situación del sector hotelero es "muy complicada" y has aventuraron futuros cierres de establecimientos si siguen proliferando estos alojamientos. El pequeño empresario con hostales o albergues de mediana capacidad son los que más notan esta "competencia desleal".

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