El Hospital Reina Sofía de Córdoba atiende más de 1.200 primeras consultas por alergia en niños cada año
Sanidad
El centro sanitario y la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica forman al profesorado para saber actuar ante una crisis alérgica en las aulas
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El Hospital Universitario Reina Sofía acoge una sesión formativa dirigida al profesorado y personal no docente de centros educativos centrada en la actuación que se debe seguir ante una posible crisis de asma o reacción alérgica entre su alumnado. Se trata de una de las actividades programadas dentro del 48 congreso de la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (Seicap) que se ce-lebra en Córdoba del 16 al 18 de mayo.
El objetivo de esta iniciativa es paliar las posibles carencias, enseñar al profesorado y personal de comedor cómo detectar precozmente una reacción alérgica y en qué consiste su manejo inicial antes de la llegada de los servicios de emergencia.
El director gerente del hospital, Francisco Triviño, participa en el arranque de este encuentro de gran importancia, ya que el 30% de la población pediátrica sufre algún tipo de alergia y pasan en el colegio un tercio de su tiempo diario. Concretamente, se estima que un 10% de la población pediátrica tiene asma, entre un 25 y un 30% rinitis o rinoconjuntivitis alérgica, y entre un 4 a 8% de menores de 14 años tiene alergia a algún tipo de alimento (entre 50.000 y 100.000 niños y niñas en nuestra comunidad autónoma). El tipo de alimento que produce alergia va a depender de la edad, pero el huevo y la leche son los más frecuentes en menores de dos años y, en los escolares, los frutos secos, frutas, pescado y crustáceos.
La unidad de Alergología Pediátrica del hospital cordobés atiende más de 1.200 primeras consultas, unas 4.000 revisiones y se realizan más de 700 pruebas de exposición oral controlada a alimentos y unos 350 procedimientos de inmunoterapia oral con alimentos.
En este sentido, el pediatra referente en alergia infantil del hospital, Javier Torres, señala que “la información y la formación del personal, docente y no docente, re-dunda en entornos más seguros para los escolares con alergia, y que este tipo de actividades son importantes porque nos hacen conocer y compartir las vivencias, opiniones y problemática de los involucrados en este tema, lo que nos lleva a empatizar y a hacer puestas en común para mejorar entre todos la situación de estos niños y niñas”.
Precisamente en esta línea ha incidido el director gerente del hospital, quien ha seña-lado la importancia de este encuentro, “que permite conocer las diferentes realidades y hacer una puesta en común para que los niños y niñas estén más seguros”. En este sentido, el director gerente ha felicitado también la iniciativa “que no sólo busca formar en saber identificar y actuar ante una crisis, sino también en prevenir que se produzcan estas situaciones”.
Tipos de tratamiento
En el caso de la alergia alimentaria, el tratamiento ha consistido a lo largo de los años en evitar tomar el alimento. El doctor Torres explica que con estas dietas de exclusión se consigue la curación de forma espontánea en muchos niños por debajo de los 2 y 3 años. Pero una vez se rebasa esa edad “es cada vez más difícil que remita la alergia alimentaria con esta estrategia, que tampoco está exenta de riesgos, ya que es difícil evitar determinados alimentos y es complicado no encontrar leche, huevo y frutos secos en alimentos procesados”.
Ante esta situación, en el Hospital Reina Sofía se ofrece desde 2010 la inmunoterapia oral (ITO) con alimentos, que consiste en realizar una exposición progresiva (en frecuencia y cantidad) al alimento al que el niño es alérgico, buscando que sea su propio sistema inmune el que genere mecanismos de tolerancia.
En el caso del asma, el tratamiento se basa en escalones, explica el doctor Torres, y la mayoría de los pacientes están bien controlados con el tratamiento continuado de corticoides inhalados a dosis bajas y medias (escalones de 1 a 3). En los casos de mal control, las principales causas suelen ser que el paciente deje de tomar el medicamento, que no se realicen bien las inhalaciones o que existan factores en el domicilio que deben ser modificados (tabaco, humedades, mascotas, etc.)
La jornada
La jornada, que tiene lugar este martes, de 16:00 a 19:30, proporcionará información sobre qué son el asma y las alergias alimentarias, cómo evitarlas y cómo abordar reacciones alérgicas graves a alimentos. Además, familias de escolares con alergia o asma aportarán su punto de vista a este problema y el abogado de la asesoría jurídica del Colegio Oficial de Médicos de Córdoba hablará del marco legal existente en materia de salud escolar.
La Seicap advierte que la anafilaxia es la reacción más grave que puede producirse en un niño con alergia y hasta un 20% de los casos de anafilaxia pueden desencadenarse en el ámbito escolar. En este sentido, la sociedad científica ofrece su apoyo a la población general y a la comunidad escolar en particular para mejorar sus conocimientos. Es importante conocer los alimentos a los que cada escolar tiene alergia y las características de los cuadros que ha sufrido hasta ese momento.
También es importante saber que algunos materiales escolares pueden contener alérgenos, como algunas marcas de tizas que contienen leche (caseína), y que pueden existir trazas de soja u otras legumbres en témperas o ceras, así como gluten y/o legumbres en pintura de dedos y pasta de moldear y soja o legumbres en maquillajes infantiles.
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