Grandes bodas con menos dinero

Catering, vestido, viaje de novios, álbum de fotos. Con todo esto y algún que otro gasto más es con lo que se encuentra toda aquella pareja que quiere dar el sí quiero en el altar. Y, lo peor de todo, es que en momentos de crisis las cuentas no salen. Así, lo que se supone que es uno de los días más bonitos para los enamorados, en muchas ocasiones se convierte en todo un quebradero de cabeza lleno de números y más números.

La fórmula más seguida por la mayoría de parejas para conseguir que el día de su boda no afecte mucho a su bolsillo es aprovechar las buenas ofertas. Y una gran ocasión para ello es la Feria de la Boda, Cyboda, que se celebra desde el pasado jueves hasta el lunes en el pabellón Cajasur del Parque Joyero. Los empresarios dedicados al sector ofrecen sus productos y sus servicios a sus potenciales clientes con unos descuentos muy suculentos.

Lo que antes era fundamental ahora pasa a un segundo plano, y de esto no se libra ni el vestido. "Las novias antes tenían más margen de maniobra, ahora la mayoría se ajustan a un presupuesto y dependiendo de éste se decantan por un modelo u otro", asegura Toñi Borrego, la encargada del expositor de la empresa Luisa Rasero-Centronovia. Y buena cuenta de ello pueda dar María del Carmen Martín, que contraerá matrimonio el próximo mes de junio. "Para cada cosa dispongo de una cantidad concreta de dinero y de ahí no me puedo salir porque sino la boda se nos pone por las nubes", asegura esta joven de 25 años que ayer visitó la feria.

Otro de los apartados que también está sufriendo los efectos de la crisis es el banquete. Si antes el número de invitados a veces era, incluso, excesivo ahora la lista se recorta al máximo, llegando a ser un círculo reducido de familiares y amigos. "A nosotros nos encantaría poder invitar a muchos más de nuestros conocidos, pero se sale de nuestras posibilidades", asegura Mario Torres mientras echa un vistazo a varios presupuestos. Uno de los expositores de la feria dedicado al convite es El Trovador Catering. Su encargado Manuel Fernández también coincide en que la crisis "afecta a todo", de modo que han tenido que amoldar su oferta a cualquier perfil de cliente.

A la hora de dejar inmortalizado el día de su boda los futuros matrimonios también se decantan por un servicio de calidad, pero que a la vez les ofrezca un precio exclusivo. "Queremos que ese día quede plasmado en un buen reportaje fotográfico y en un vídeo original, pero que su precio no sea desorbitante", le pide una futura novia a la responsable del stand Iman Social. Su encargada Carmen Cost le muestra algunos álbumes y sobre todo las ofertas que puede encontrar si contrata sus servicios. Y es que este gasto puede llegar a ascender hasta los 2.000 euros. "La gente nos pregunta cada vez más por los precios e intentan apretarnos las tuercas al máximo", dice Cost. No obstante, reconoce que en muchas ocasiones tienen que ceder un poco más, ya que el sector nota como el número de bodas baja en picado. "La crisis unida a las supersticiones por el año 2013 está dejando un panorama muy negro para elpróximo año", asegura.