La Fiscalía archiva dos denuncias de niños robados por falta de pruebas
El Ministerio Público investiga otros 12 casos ocurridos entre los 60 y los 80
La Fiscalía ha archivado ya dos denuncias sobre posibles casos de niños robados en hospitales de la provincia, según informó ayer el fiscal jefe de Córdoba, José Antonio Martín-Caro. En ambos casos, el Ministerio Público ha tomado esta decisión por carecer de pruebas o pistas que puedan ayudar a esclarecer si podrían tener alguna base las sospechas de los familiares de los recién nacidos, quienes consideraron que el personal sanitario pudo haber simulado la muerte de sus hijos para darlos en adopción o venderlos.
Los dos primeros archivos en Córdoba siguen la línea de lo ocurrido en otras provincias como Granada, donde ya se ha dado carpetazo a 13 expedientes por falta de pruebas. Martín-Caro destacó la dificultad de aclarar las denuncias por el tiempo transcurrido desde que se produjeron los presuntos delitos. La Fiscalía de Córdoba mantiene abiertas 12 investigaciones.
El Ministerio Público inició las indagaciones por la presunta desaparición de bebés entre los años 60 y los 90 el pasado mes de febrero a petición de la Fiscalía General del Estado. Aunque el presunto robo de recién nacidos desde la década de los 60 permanecía en la sospecha, no ha sido hasta este año cuando la Justicia ha iniciado una investigación.
Desde el 27 de enero, de hecho, el Fiscal General del Estado, Cándido Conde-Pumpido, cuenta con una importante misión: investigar la denuncia por robo de 261 niños, presentada por la Asociación Nacional de Afectados por Adopciones Irregulares (Anadir). El colectivo está formado por personas que quieren arrojar luz sobre sus familias biológicas y sobre su pasado. En el colectivo hay casos de todo tipo como, por ejemplo, padres que buscan a sus hijos, hijos que buscan a sus hermanos desaparecidos o hijos que buscan a sus padres biológicos.
La mayoría de los casos de robos de bebés se sucedieron entre los años 60 y 70, pero también se extendieron durante buena parte de los años 80 e incluso en los 90. Madrid, Andalucía y Cataluña son las comunidades que más denuncias de robo acumulan.
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