Ferrán Adrià, el chef que revolucionó la cocina al convertir El Bulli en el mejor restaurante del mundo de 2004 a 2009, cambió el blanco de la chaquetilla por la chaqueta negra y es ahora un Pep Guardiola del coaching: un elegido para la comunicación de emociones -aunque se traba en ocasiones porque sus ideas van más rápido que su boca- que combina a la perfección con el "papel de agitador" necesario que un embajador social debe asumir, más allá de hacerse la foto. Un papel que ha representado en un momento importante para Las Palmeras: la inauguración de la cocina comunitaria La Foggara, un espacio que proporcionará menús y formación en alimentación saludable a una treintena de familias de uno de los barrios más pobres de España.

"¿A cuántas familias se le dará de comer aquí al día? ¿Y quién cocinará? ¿Y con qué dinero?; Que sea saludable, sí, pero también que esté rico, ¿no? Si es solo saludable...; Hay que comer muy variado y poca cantidad; Tenéis que ser pragmáticos, eh; ¿Y cómo le vais a dar difusión a la actividad diaria para que la gente se entere? Con esto solo no vale". Con esa batería de preguntas y advertencias dirigidas los miembros de Servicios Sociales del Ayuntamiento y de la Fundación La Caixa que apadrina, Ferrán Adrià se ha comido el guion de un día histórico y "especial" en Las Palmeras.

Histórico sobre todo en lo anecdótico porque es una excepción que uno de los mejores cocineros del mundo visite el barrio más deprimido de la ciudad; y especial porque, "pone el broche, por fin, a la apertura de la cocina La Foggara", ha afirmado la delegada de Servicios Sociales del Ayuntamiento, Eva Contador.

Éste es un "proyecto social importante para el barrio" heredado de la anterior corporación (PSOE-IU), "que se dijo que estaba prácticamente atado para abrir una escuela formativa de cocina, aunque la realidad es que arrastraba una falta de requisitos de homologación o seguridad", y, por tanto, la actual delegación tuvo que "rediseñar el proyecto", han explicado fuentes municipales.

Descubrimiento de la placa de La Foggara con el alcalde, Eva Contador, Ferrán Adrià y el Gerardo Cuartero.

En lugar de una escuela formativa de cocina, la nueva misión de La Foggara será alimentar a 30 familias del barrio (unas 100 personas aproximadamente) los siete días de la semana hasta, al menos, final de este año y enseñar a cocinar de forma saludable. Los lunes, miércoles y viernes a mediodía se encenderán los fogones para que una de las 30 familias, en turnos rotativos, cocine los menús para el resto de beneficiados, teniendo en cuenta el menú para los martes, jueves y fines de semana. Del suministro de alimentos se encargará la Fundación La Caixa (30.000 euros hasta diciembre), que también coordinará talleres y actividades dos tardes a la semana "para que puedan desarrollar sus habilidades, competencias y tener un futuro con más oportunidades", ha destacado el director comercial de Caixabank, Gerardo Cuartero.

El objetivo es que se hagan "menús saludables", aprovechando los cimientos de un taller sobre este tipo de hábitos que impartió personal del Imibic en este barrio. Será todo un reto de "pragmatismo" culinario, como dice Ferrán Adrià, ya que el menú diario de cada persona estará valorado en unos 5 euros. Para ello, el chef se ha permitido recomendar un bestseller de recetas propio (La comida de la familia) para que lo tomen de referencia en el proyecto, en el que desarrolla platos para los 30 días del mes, con poco presupuesto.

"Cocinar no se puede ver como una frivolidad"

Adrià ha reivindicado que "cocinar es un hecho muy importante a nivel económico, cultural y de salud. "Cocinar no se puede ver como una frivolidad. Es la actividad que más genera. Los agricultores, los que hacen el pan y el aceite también son cocineros", ha dicho. Por eso, ha pedido "mayor inversión en educación gastronómica" y una reflexión por parte de las administraciones: "¿Qué presupuesto destinan en universidades para la gastronomía?".

Pero, "esto no es solo función de los políticos", ha continuado el chef, sacando nuevamente su vena agitadora a relucir para solicitar también el compromiso de la empresa privada, "que tiene un papel importantísimo a la hora de ayudar": "¿Cuántas becas de empresas privadas hay?".

"Esto son semillas. Y si no hay semillas no salen árboles ni plantas", ha concluido positivamente el cocinero catalán, valorando la colaboración publico-privada del proyecto de la Foggara que ha apadrinado en Córdoba. El alcalde, José María Bellido, ha añadido que "estas semillas son medidas que van sumando para que la situación de las familias de Las Palmeras mejore y puedan verse con más oportunidades diarias en el futuro".