La Comandancia de la Guardia Civil en Córdoba contará con un Equipo @ de prevención y respuesta en materia de ciberdelincuencia. Estos equipos se enmarcan dentro del Plan Estratégico contra la Cibercriminalidad del Ministerio del Interior creado para prevenir, proteger y perseguir la cibercriminalidad, y así garantizar la seguridad y la protección de los derechos y libertades de los usuarios en el ciberespacio.

Es el anuncio que ha hecho la directora de la Guardia Civil, María Gámez, durante la presentación de estos equipos en Córdoba, que se han puesto en marcha este lunes 4 de octubre en toda España. Gámez ha detallado que se trata de una red formada por 84 equipos en toda España, de la que forman parte 304 efectivos que orientarán su trabajo a combatir en cibercrimen. "Cada Comandancia tendrá un equipo y en algunas provincias habrá un despliegue más amplio", ha añadido.

Hasta ahora, ha continuado, "se contaba, por un lado, con equipos altamente especializados dedicados a delitos más graves y por otro, con unidades de seguridad ciudadana encargadas de esa primera respuesta. Ahora con estos equipos cubrimos ese salto entre unos y otros".

En el caso de la provincia de Córdoba, el Equipo @ estará integrado por cinco agentes, mientras que en toda Andalucía habrá nueve equipos con 51 efectivos en total. En el conjunto de España, hay 84 equipos integrados por 304 agentes.

En concreto, se trata de equipos funcionales encargados de reforzar la respuesta en materia de  ciberdelincuencia, en particular ante estafas en la red y constituyen el primer nivel de respuesta específica a la cibercriminalidad, apoyando a las unidades territoriales que se encuentran orientadas a la ciudadanía, realizando un primer tratamiento de este tipo de delitos, apoyando a la Policía Judicial específica mediante el análisis de los ciberdelitos, y potenciando la interlocución de calidad con las víctimas.

Gámez ha reconocido que la cibercriminalidad se ido incrementando en los últimos cinco años de manera "muy significativa" y, más aún desde la pandemia y el mayor uso de internet durante el confinamiento para gestiones administrativas y relaciones personales. 

Y este aumento del consumo de internet ha traído consigo una subida de los presuntos delitos relacionados con las tecnologías de la información y las comunicaciones, como muestran los datos ofrecidos, hace pocos días, por el Ministerio de Interior en 2020, donde crecieron un 32% respecto al año anterior.

Gámez se ha centrado en las estadísticas en demarcación de la Guardia Civil durante los últimos cinco años. Así las cosas, entre 2016 y 2020, las unidades de la Guardia Civil han registrado un aumento de cerca del 139% del número de ciberdelitos, mientras que hace cinco años, la cibercriminalidad representaba un 4,5% de los delitos.

Otro de los datos que ha expuesto es que durante el año pasado, este tipo de delincuencia ya representaba el 11,9%, y en el primer semestre de 2021, suponen el 13,65% del total de la delincuencia (33.264 delitos en los seis primeros meses de este año, con subidas más significativas los primeros cuatro meses; representan un 41,35% más que en 2020).

Así las cosas, actualmente, uno de cada ocho delitos cometidos en demarcación de la Guardia Civil están relacionados con internet, mientras que hace un lustro, esa proporción era 1 de cada 20, ha destacado la directora general.

La hetereogenidad es una de las características de este tipo de delitos, ya que van desde delitos contra el honor, contra la propiedad industrial e intelectual, amenazas y coacciones hasta contra la libertad sexual. En este caso, el delito más común es el fraude informático, que acapara casi el 80% del total de hechos presuntamente delictivos.

En el caso del perfil del ciberdelincuente, Gámez ha dicho que es hombre (el 73% de los detenidos o investigados), de entre 26 y 40 años, nacionalidad española y presuntamente implicado en la comisiónde fraudes informáticos, amenazas y coacciones y delitos sexuales.

Estos grupos representan el primer nivel de respuesta específica a la cibercriminalidad, apoyando a las unidades territoriales y a la Policía Judicial y potenciando una interlocución de calidad con las víctimas."Queremos tener la capacidad de dedicarnos a resolver un delito informático por valor de millones de euros sufrido por una empresa, pero también queremos atender a un particular a quien han estafado 500euros, por ejemplo", ha anotado.

Reforzar la respuesta del Cuerpo en materia de ciberdelincuencia, en particular, ante las estafas en la red, que constituyen uno de los principales problemas en este ámbito son algunas de las funciones de estos equipos, que también  serán los encargados de recibir las denuncias por ciberdelito que, por su grado de complejidad, precisen una intervención específica, además de elaborar los informes que se establezcan y supervisar la calidad de la grabación de las denuncias recibidas.

Asegurar la atención a las víctimas y perjudicados del ciberdelito, ofrecer un asesoramiento y proporcionar una atención específica a ciudadanos y empresas sobre todo lo relacionado con la ciberdelincuencia, específicamente con las estafas en la red son otras de las tareas que llevarán a cabo, además de asesorar y orientar a los miembros del Cuerpo de las unidades territoriales que reciban denuncias por ciberdelito, sobre todo estafas en la red.