Cosmos tiene que valorizar para ser viable y defiende que debe hacerlo en el lugar actual porque de tener que cambiar de ubicación, se condenaría a la fábrica "al fracaso". Así lo defendió ayer el director de la fábrica de Cosmos en Córdoba, José de la Vega, quien insistió en que trasladar la fábrica es inviable porque, detalló, no sería un traslado, sino construir una cementera nueva. En este sentido, De la Vega sí avanzó que la empresa estudiará las alternativas que ofrezca el cogobierno, siempre y cuando éstas sean totalmente viables, algo que resulta complicado teniendo en cuenta la postura de IU y PSOE. Precisamente sobre el anuncio que hizo en su día el presidente de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU), Pedro García, en el que planteó que Cosmos se trasladara a unos terrenos cercanos a El Lobatón, De la Vega aseguró que éste no se ha puesto en contacto directo con ellos, sino que "conocemos lo que ha salido en los periódicos".

En este sentido, De la Vega afirmó que de momento conocen la intención de la Gerencia de innovar el PGOU, de manera que la gran industria como Cosmos no pueda ejercer actividades como la valorización de residuos cerca de núcleos de población. "Sólo sabemos que se ha aprobado en Pleno continuar con un trámite de innovación del PGOU que saldrá a información publica y cuando leamos en qué consiste podremos tener una idea de las consecuencias que puede tener para nosotros", añadió.

El director de la fábrica dice que la misma está abocada al fracaso si no puede valorizar

Con ello, y ante la pregunta de si trasladar la fábrica sería factible, De la Vega insistió en que habría que empezar de cero, lo que conlleva una serie de inversiones "inviables desde el punto de vista financiero, por lo que no vemos que eso pueda tener una viabilidad en otra zona diferente a la actual". Pero ahora está sobre la mesa el proceso de innovación de la normativa de ordenación, que de salir adelante, implicaría que Cosmos no pueda utilizar residuos como combustible, pero sí coque de petróleo. Si, por lo tanto, en la fabricación del cemento Cosmos no pudiera utilizar residuos como combustible las consecuencias, según el director de la fábrica, serían las peores. "Sin la herramienta del CDR [combustible derivado de residuos], los costes de esta fábrica estarían muy perjudicados respecto al resto de la competencia", lamentó el responsable de la fábrica.

"Hoy en día, entender una fabrica sin la posibilidad de valorizar los combustibles que la tecnología, el medio ambiente y la legislación nos permite utilizar, es condenarla al fracaso en un tiempo relativamente corto", advirtió De la Vega, quien explicó una vez más que las causas de querer esos residuos son varias. Por un lado, apuntó, está el punto de vista económico. El CDR es más barato que el derivado del petróleo, por lo que si sólo pudieran utilizar el segundo no podrían estar al mismo nivel que la competencia. Por otro lado, está el argumento medioambiental, y es que De la Vega aseveró que la quema de residuos es menos contaminante que la de coque de petróleo según, añadió, "datos de las autoridades medioambientales". A ello añadió que ese CDR produce menos emisiones por tonelada que el petróleo y a su vez evita que los residuos acaben en el vertedero.

En este sentido, el director de la fábrica cordobesa explicó que desde inicios de este año se están utilizando residuos como combustible, dentro de los máximos que permite la normativa. El horno de la cementera, que actualmente trabaja a un 25% de su capacidad, en su procedimiento para hacer clínker (que después se muele para obtener el cemento) utiliza un 30% de residuos y un 70% de coque de petróleo. Para el uso de esos residuos, continuó De la Vega, se tiene en cuenta la propia licencia de fabricación de cemento.