La imposibilidad de garantizar una presencia permanente y con efectivos suficientes de la Guardia Civil, transmitida desde la Subdelegación del Gobierno, ha provocado que el Ayuntamiento de Carcabuey limite a un día la restricción en el acceso al municipio diseñada en la segunda mitad de Semana Santa. En esta localidad continúa sin detectarse ningún positivo por coronavirus.

La prohibición de acceder al casco urbano, salvo en las excepciones que contempla el Real Decreto que establece el estado de alarma por la emergencia sanitaria, mantendrá su eficacia entre las 15:00 del miércoles y la misma hora del Jueves Santo. Por consiguiente, el Consistorio modifica su planteamiento inicial que alargaba esta medida hasta el Viernes Santo.

Otra variación atañe al número de accesos habilitados. Entre el Viernes de Dolores y el Domingo de Ramos, únicamente quedaba expedito, para la circulación de vehículos hacia el interior de este municipio de la Subbética, el tramo que avanza por la carretera CO-7209 y discurre entre la piscina municipal y la Fuente Catalina. A este punto se añade la vía que parte desde el entorno de la sede de la Mancomunidad de la Subbética y desemboca en la calle Zagrilla. Los demás trayectos, que transcurren por otros caminos y entornos rurales, se inhabilitan con la colocación de obstáculos de grandes dimensiones.

En este segundo período de intensificación de la supervisión del tránsito de medios de transporte, la vigilancia la emprenden guardas rurales y vigilantes municipales. Como en la primera ocasión, personal de limpieza fumigará y desinfectará cualquier coche que se adentre, con el permiso oportuno, en Carcabuey.

Desde el Ayuntamiento, ponderan de forma "muy positiva" el resultado del reforzamiento del control del tráfico rodado implementada en el último fin de semana. El desarrollo de esta determinación, señalan, se produjo de manera adecuada y sin ninguna incidencia reseñable.

Fuentes municipales han confirmado que “nadie de fuera” intentó visitar Carcabuey y solamente se introdujeron dentro de la localidad residentes que provenían de otros lugares, servicios básicos y trabajadores autorizados como, por ejemplo, empleados de empresas de reparto a domicilio.

Una normalidad, en este encapsulamiento, que ratifica la ausencia de denuncias. Ninguna persona trató de evadir esta normativa municipal, aprobada por el Gobierno central al concernir, únicamente, al viario urbano.