Se trata de un sello de calidad, el de buenas prácticas Córdoba Incluye, una imagen corporativa relacionada con la accesibilidad universal, ideada por la Delegación de Inclusión y Accesibilidad del Ayuntamiento de Córdoba y que ha presentado su responsable, Bernardo Jordano. Este sello acreditará las buenas prácticas de hasta 45 establecimientos de la capital, incluidos cinco hoteles, ubicados en la ruta que va desde la plaza de las Tendillas hasta el Paseo de la Ribera.

Pero, ¿cómo lograrán estos locales este sello? Pues eliminando los problemas de accesibilidad que presenten, pero no solo de carácter arquitectónico, sino también aspectos como que su plantilla pueda atender a clientes en Lengua de Signos o que una persona con discapacidad visual pueda leer la carta de un restaurante. "Todo eso sumará para obtener este sello de buenas prácticas", ha detallo Jordano.

El proyecto nace de la Ruta de los Museos, que se presentó en Fitur, y en la que se han detectado 45 establecimientos. Para poner en marcha este programa se han establecido tres fases. La primera de ellas es de carácter informativo, que se llevará durante el mes de agosto. La segunda incluye la realización de visitas "a quien lo solicite" y la tercera será la entrega del informe, con el que se cataloga el grado de cumplimiento de accesibilidad por local. Una vez conocido ese cumplimiento, se hará una selección de candidatos al Sello Córdoba Incluye.

Entre los espacios propuestos se encuentran establecimientos comerciales y edificios oficiales como museos o iglesias, que se encuentran en la plaza de Las Tendillas, en la calle Duque de Hornachuelos, la plaza de la Compañía, la calle Marqués del Villar, la plaza Jerónimo Páez, la calle Cabezas, el Compás de San Francisco, y las calles San Fernando y Lucano, la plaza de Potro, además de la vía Enrique Romero de Torres y el Paseo de la Ribera. 

La concesión del sello funcionará "como el sistema de estrellas de hoteles y el que se acerque al sobresaliente tendrá todos los sellos posibles de Córdoba Incluye y el que se salga de la media tendrá algunos sellos, pero con menor intensidad", ha apuntado Jordano, quien ha insistido en que con el proyecto "buscamos fomentar que los establecimientos abiertos al público se salgan de lo habitual y que vayan a mejor". 

Como ejemplo, el edil del PP ha expuesto el caso de la Fundación Antonio Gala: "somos conscientes de que en edificios de ese tipo las barreras arquitectónicas son muy difíciles de resolver, pero si dan un paso importante y adaptan su material a personas con discapacidad visual, sería magnífico porque sería dar acceso a esa oferta cultural a un colectivo que antes no lo tenía".