Córdoba sigue sumando parados pero, al menos, parece que a un menor ritmo que el conjunto de Andalucía. En octubre, 197 cordobeses se sumaron a las listas del paro, es decir un 0,24% más, aunque ese incremento es el menor de los que se produjeron en toda la comunidad autónoma, según el informe elaborado por el Ministerio de Trabajo. En este ranking, Málaga y Jaén son las provincia que presentan los peores datos con un 3,2% y 3,09% más respectivamente. Además, la media de crecimiento de parados en Andalucía se quedó en el 1,6%. Almería fue la única provincia que experimentó un descenso del paro, pues 1.813 personas abandonaron las listas del Servicio Andaluz de Empleo (SAE).

Si se comparan los datos con los del mismo mes del año pasado, el resultado sigue siendo negativo, pues ahora hay 4.489 parados más que hace 12 meses. La subida interanual también es de las más bajas de Andalucía, sólo por delante de Jaén. A pesar de este menor incremento, Córdoba cuenta ya con 80.649 desempleados, una cifra que se eleva hasta 118.000 según la última Encuesta de Población Activa (EPA) relativa al periodo comprendido entre julio y septiembre. En la EPA, además, la tasa de paro se sitúa en el 31,2%, un porcentaje histórico que es el más alto de toda España.

Analizando el comportamiento de los sectores, sorprende que la construcción ha encadenado ya varios meses de cifras positivas, como es el caso de este último mes de octubre que ha restado 317 parados. La programación de obras a cuenta de los fondos anticrisis es la principal causa de estos mejores resultados, ya que el segmento residencial todavía no ha dado unos síntomas de recuperación tan evidentes como para la creación neta de empleo. En cualquier caso, la construcción sigue siendo el segundo grupo que engloba a un mayor número de parados (13.683 personas). La industria es el otro sector que ha contribuido a la ralentización de la subida del paro en la provincia, pues ha creado 161 empleos en octubre. El tejido productivo está saliendo al rescate de una economía dependiente en exceso de los servicios o la agricultura. Precisamente, estos dos sectores son los que han presentado un peor balance en el mes de octubre. En el caso del campo, ha sumado 34 parados mientras la rama terciaria 266. Los servicios cuentan ya con 39.009 cordobeses sin trabajo, la mitad del total de los que buscan un empleo, y es la rama que peor perspectivas tiene. El comercio, por ejemplo, ha sufrido una oleada de cierres en los últimos años por la situación económica, sobre todo, los pequeños empresarios que no están ligados a franquicias o cadenas. El turismo parece que se está recuperando aunque también ha vivido un tiempo de vacas flacas que se demuestra sobre todo a la escasa (y precaria en algunas ocasiones) contratación que se observa en el sector.

Otro dato que preocupa en las instancias oficiales es el de los nuevos parados, que no deja de crecer. Durante el mes de octubre se incorporaron a las listas 375 cordobeses que no habían trabajado antes en busca de una oportunidad laboral. En este punto tienen mucho protagonismo la mujeres mayores de 45 años que salen al rescate de la economía familiar y los jóvenes que, después de acabar sus estudios, se encuentran con una pobre oferta laboral. En total son 11.568 los cordobeses que quieren incorporarse al mercado de trabajo. De ellos, casi un tercio (4.211 personas) son jóvenes menores de 24 años de edad.

En cuanto a la contratación, durante octubre se firmaron 34.914 vinculaciones laborales, un 7% más que el mes anterior. Sin embargo, esta subida se debe sobre todo a los contratos temporales, que son los que han crecido, mientras que los indefinidos han caído un 7,5%. La estadística del Ministerio de Trabajo muestra además que nueve de cada diez documentos que se firman en la provincia tienen un tiempo de duración y sólo un pequeño porcentaje se dedica a la contratación indefinida.