Consejos para evitar a carteristas
La provincia registra una reducción del 7% en las denuncias de hurtos Hay unos "puntos negros" en los que tener cuidado
Durante el verano, los cordobeses disfrutan de las vacaciones con esos viajes que llevan planeando durante todo el año, o con un bien merecido descanso en casa. Algo parecido parece que ocurre con los carteristas, salvando las distancias, ya que en el periodo estival se aprecia en la provincia una reducción del 7% en el número de denuncias por hurto, lo que parece deberse al éxodo de población que se registra durante el verano, según la empresa de seguros CPP. Esto quiere decir que hay menos gente en verano y, por tanto, menos hurtos y denuncias por los mismos. Por el contrario, la presencia de estos ladrones es más frecuenta en las zonas de costa, como las provincias de Málaga, Cádiz y Almería, cuyo número de denuncias por hurto crece en verano un 10%, un 8% y un 6% respectivamente respecto al primer trimestre del año. En Sevilla se registraron en el tercer trimestre de el año pasado un 21% de las denuncias por hurtos de toda Andalucía, a pesar de que la provincia sufre el mismo fenómeno de reducción de denuncias que Córdoba, así como de Jaén y Granada. El caso de Huelva no sigue esta regla ya que, a pesar de que el verano para la provincia supone un aumento en materia de población y turismo, se percibe un descenso en la cantidad de denuncias por este tipo de delitos, que incluso se redujeron un 1% respecto al primer trimestre del año.
En el resto de España, la situación es similar: el aumento de denuncias (y por tanto de hurtos) sufre un incremento en los meses de verano o bien coincidiendo con festividades. Cataluña -cuya capital, Barcelona, es conocida por la gran cantidad de carteristas- es el territorio en el que más hurtos se han denunciado a las fuerzas policiales, con una cuarta parte del total en todo el territorio nacional. Este número también sufre un aumento -en este caso del 5%- en verano.
Los todavía recientes sanfermines disparan en Navarra la cifra de estos delitos, que registra en la época estival un incremento del 36% del total de denuncias respecto al primer trimestre de 2015. Es el caso contrario que otras comunidades como Madrid, que ve reducido el número de denuncias por hurtos un 17% en el tercer trimestre. Aun así, el total de este tipo de delitos se ha visto incrementado en un 3,5% durante el verano de 2015, según el ministerio de Interior.
Los datos indican que son los turistas el principal objetivo de los carteristas, que buscan a los más despistados para sustraerles su dinero, teléfono móvil o cámara de fotos. Por ello desde CPP han recomendado prestar especial atención en las estaciones de tren y autobús o en los aeropuertos, en las salidas a bares y restaurantes, así como en las visitas a la ciudad a causa del timo del mapa (donde uno de los malhechores roba a un turista mientras su cómplice le pregunta una dirección en un mapa). Por desconocimiento del lugar en el que se encuentran, diferencias idiomáticas o de costumbres, generalmente las personas que están en otro lugar de vacaciones son el blanco perfecto, y más con el aliciente de que un turista no suele interponer una denuncia y, en caso de hacerlo, debería personarse en un juicio que puede que sea en un lugar -el sitio que visita- bastante lejano. Por tanto, hay que tener cuidado cuando se viaja debido a estos ladrones.
El sentido común es fundamental para no pasar el mal trago de quedarse sin dinero, documentación o teléfono móvil en el transcurso de nuestras vacaciones. Vigilar dónde dejamos nuestras pertenencias o en qué tipo de taxi nos subimos -hay que prestar especial atención en que tenga licencia- son medidas fundamentales para no pasar un mal trago durante el veraneo.
Sin embargo, por muy precavido que se sea, siempre se puede ser víctima de un carterista. Si esto llega a ocurrir es muy importante bloquear las tarjetas bancarias y el teléfono móvil, así como cambiar las contraseñas de los servicios usados desde el móvil en caso de que éste sea el objeto robado. Una vez realizados estos trámites, es fundamental acudir a una comisaría y tramitar la denuncia; cuya fotocopia hay que guardar para tramitar los duplicados de la documentación y acreditar que estos documentos han sido robados.
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