Cae la junta del Colegio de Arquitectos al no aprobarse sus presupuestos

Los 600 miembros del Colegio de Arquitectos de Córdoba volverán a ser llamados a las urnas después de que esta semana se haya producido la dimisión, en bloque, de la junta directiva que presidía Manuel Moreno al no conseguir la aprobación de la asamblea de sus presupuestos para 2012. Al contrario, el máximo órgano de decisión de la entidad profesional -según la distinta documentación- aprobó una enmienda a la totalidad de los presupuestos que la junta directiva saliente no estaba dispuesta a aplicar. Dicha modificación fue aprobada por una amplia mayoría de los miembros presentes.

La junta directiva dimisionaria presentó un proyecto de presupuestos que ascendía a 800.000 euros, incurriendo por tanto en déficit de 13.000. Pese a que se abordaba un recorte, el coste de personal asciende a un 60% de los recursos del colegio. La enmienda a la totalidad pretendía que ese coste fuera del 40%. Más que despidos, la enmienda pretendía que se negociara con el personal del colegio para propiciar salidas pactadas y una reducción de horario y salario. La entidad está estudiando además la venta de un local en Pérez Galdós, que ocupa Arquia, la cooperativa profesional de crédito. La enmienda, finalmente aprobada, propone dedicar esos ingresos al coste de los despidos y a la reorganización que tuviera que realizarse. Esa propuesta supone también incurrir en un déficit de 13.000 euros aunque con un presupuesto de ingresos y gastos de algo más de medio millón de euros.

Además, había diferencias de fondo. "Desde 2008 no trabaja nadie", se puede leer en la enmienda. El Colegio de Arquitectos se financia, menos, por cuotas y, más, por el visado colegial, un sello necesario para conseguir licencias. Al existir menos obra pública y privada, este concepto es ahora de 512.000 euros anuales cuando llegó a ser del triple de esa cantidad. Los críticos entendían que, con la actual situación de la profesión, la entidad estaba burocratizada. Se proponían más colaboraciones puntuales, un nuevo modelo de visado (más cercano a la declaración responsable), la eliminación de la figura del arquitecto asociado propuesta por la directiva, un recorte sustancial en las cuotas y menos dinero para homenajes a colegiados.

La directiva saliente contestó a esa enmienda explicando que, aunque algunas de las propuestas ya venían recogidas en su proyecto presupuestario, otras eran "inasumibles al corto plazo" constituyendo "una nueva propuesta programática". Aseguraba que se abordan medidas difícilmente gestionables como un tratamiento no homogéneo del visado de acuerdo con lo previsto con otras instancias colegiales, cuando lo que se está abordando es trabajar de forma homogénea. El documento, firmado por cinco miembros de la Junta de Gobierno, aseguraba que, en el caso de que fuera aprobado, no se asumiría y se renunciaría de forma inmediata. La enmienda, que denuncia el intrusismo y la escasa defensa del profesional que realiza el Colegio de Arquitectos, fue aprobada por 51 votos a favor y 33 en contra.

En estos momentos, se ha formado una junta de edad que tendrá la responsabilidad de convocar elecciones en un plazo no superior a 30 días. Este periódico intentó ayer, sin éxito, contar con declaraciones del decano saliente, Manuel Moreno, que lleva en el cargo desde 2008.