El Consejo del Movimiento ciudadano (CMC) ha exigido al gobierno municipal la adopción de medidas organizativas que permitan agilizar las contrataciones municipales, en especial, las de obras que se tienen prometidas desde hace dos o tres años y que nunca han visto la luz. Aunque el movimiento ciudadano es consciente de las limitaciones y plazos legales, ha señalado que el ayuntamiento cuenta con margen para disponer de mecanismos que permitan que en 2021 se recupere el retraso histórico en la ejecución de proyectos demandados por los barrios y distritos de la ciudad y que deben equilibrar los mismos.

El CMC también ha recordado la obligación y el compromiso municipal para que entre en consenso con los Consejos de Distritos, recién renovados, los proyectos a desarrollar con cargo a los presupuestos de 2021 o con remanentes de 2020. Esos proyectos forman parte de los planes de distrito y barrio, donde se recogen todas las necesidades de cada territorio integrando las demandas vecinales, comerciales, sociales, culturales... de forma ordenada y priorizada y evitan actuaciones caprichosas o que no tengan rentabilidadsocial, según ha indicado el Consejo.

"Es necesario que mientras se cuenta con el presupuesto y los remanentes se ejecuten los proyectos ya acordados, en una gran parte de forma consensuada", ha explicado el CMC, que también ha señalado la forma correcta de actuar por parte del gobierno municipal: "Esos proyectos deben darse a conocer a los consejos de distrito para que puedan hacer aportaciones a los mismos y tienen que ejecutarse contando con la creación de una comisión de seguimiento de la obra, que reúna a representantes municipales, de la empresa actora y del consejo de distrito afectado, que ha demostrado su eficacia para ajustar los ritmos, concreciones y modificaciones puntuales de la obra a la realidad de la vida ciudadana", ha afirmado el consejo.

Por último, el movimiento ciudadano ha explicado que "la pandemia no puede ser excusa para que el ayuntamiento actúe desde el máximo respeto al reglamento de participación ciudadana". Además, las decisiones políticas, los proyectos técnicos y los procedimientos reglados alcanzan su máxima eficiencia y sentido cuando cuentan con el aval ciudadano que asegura la conexión de los proyectos con el entorno, tal y como ha asegurado el CMC.

"A este respecto, al próximo año, el ayuntamiento central, las empresas y organismos autónomos, deberían incluir en esos proyectos las memorias de recorrido participativo, y que se sepa quién y cómo ha intervenido en la toma de decisiones desde la máxima transparencia y respeto democrático", ha concluido el CMC.