Berhanyer, rey de la elegancia

Elio Berhanyer se convirtió ayer en el protagonista indiscutible de la Cibeles Madrid Fashion Week gracias al desfile-homenaje organizado para celebrar el 80 aniversario de este veterano. Rodeado de algunas de las modelos que en su amplísima trayectoria han colaborado con él como Nieves Álvarez, Judith Mascó, Helena Barquilla, Tammy, Esmeralda Martín, Mónica Boada o Regina Tarnow, Elio vivió uno de los momentos más emocionantes de las cincuenta ediciones de Cibeles cuando recorrió la pasarela de la mano de Judith Mascó entre aplausos y con todo el público en pie. Al final, todo su equipo con lágrimas en los ojos aplaudía al maestro cordobés, que en 1962 presentó su primera colección.

Al desfile no faltó ninguna de sus fieles clientas que llenaron las gradas, así como sus compañeros diseñadores, organizadores y representantes políticos como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre. Todos contemplaron expectantes los nuevos diseños del modisto cordobés que de nuevo consiguió reivindicar la elegancia de la mujer con unos diseños muy diversos y, sobre todo, plagados de color.

Para la primavera/verano 2010, Elio propone para el día un estilo gemelo de la moda marinera. Destacan los vestidos a imitación del este patrón, con blusas de rayas azules o rojas horizontales y amplios pantalones cómodos de algodón de corte masculino. El diseñador juega con esta estética marinera y llena las blusas, siempre ceñidas a la silueta femenina, de botones y de cruzados para componer unos modelos variados. El material preferido para plasmar estas creaciones es la lana y el punto.

Para el cocktail y la noche el diseñador cordobés prefiere la gasa de seda natural, las tafetas, los encajes y los crepes que convierten a la mujer en una figura femenina, clásica y elegante. El diseñador toma dos opciones para cubrir a la mujer de elegancia: o bien se decanta por los vestidos de escote palabra de honor, con faldas de amplios vuelos o arrastradas, o bien cubre el torso con chaquetas ceñidas al cuerpo y faldas que dejan descubierta la rodilla y que también dibujan la silueta femenina. También cobran especial relevancia los apliques de pasamanería y los bordados. El veterano diseñador se permite algunas licencias en cuanto a los motivos de adorno de los trajes de noche, como los estampados, los bordados o las figuras de rosas.

En esta ocasión Berhanyer ha elegido una paleta de colores muy fructífera: blancos, marfiles, rojos pasión, negros absolutos, o amarillos. En cuanto a los complementos, Berhanyer los utiliza en su colección con mucha prudencia: para el día, destacan los gorros de punto blanco y los bolsos. Para la noche, el diseñador se decanta por los colgantes dorados y los collares de cristales. Los zapatos elegidos para sus modelos siguen la tónica de la feminidad, y se elevan sobre altos tacones, eso sí, dejando entrever siempre los dedos.

Tras el desfile, con el que Elio volvió a subir a la pasarela una mujer llena de elegancia, el modisto agradecía a los asistentes todas las muestras de cariño. Y aseguraba que "hoy el público ha sido maravilloso, no sé como agradecer tantas muestras de cariño". Aseguró que aún le queda por aportar en el mundo de la moda y adelantó que se encuentra con todas las fuerzas del mundo para presentar en febrero una nueva colección en la que derrochará de nuevo mucho arte y mucha clase.